Causa estupor que personas que presumen
de ateas y que incluso fomentan la cristianofobia tengan tantos
miramientos con el Islam, hasta el punto de haber habilitado un
Observatorio de la islamofobia.
Hay maldad e ingenuidad a partes iguales
en estos gestos. El Islam es totalmente incompatible con cualquier
Constitución democrática.
El hecho de que exija la sumisión ya
avisa de la intencionalidad castradora de esta religión. Que luego
no existan el bien ni el mal, sino tan solo la voluntad de Dios, deja
claro que su pretensión no es otra que la de garantizar a líderes
de esta la religión la obediencia absoluta de sus fieles en
cualquier circunstancia, porque ellos se reservan el derecho a
interpretar la voluntad de Dios.
Tener que aceptar estas religiones
totalmente incompatibles con el mandamiento constitucional es como
tragarse un sapo. Pero es que, además, en España se tienen unas
contemplaciones con ellas y un deseo de comprender que sus fieles tengan
estas creencias y de facilitarles las cosas, etc., que resulta
incomprensible.
Que haya muchos musulmanes que sean
bellísimas personas, no significa que su religión sea buena, sino
que lo son a pesar de su religión.
Si al catolicismo se le quitaran los
dogmas y el velo de las monjas sería perfectamente constitucional y
además podría ser declarado como Bien de Interés Común, en el
caso de que exista esta categoría.
Pero hay otras religiones, no sólo el
Islam, a las que no hay modo de encajar en ningún ordenamiento
democrático y esa debería ser una pista para sus adeptos. El
sistema democrático requiere de personas que han alcanzado la
madurez y tienen criterio. Y las religiones que no se pueden adaptar
a la democracia encuentran su clientela en personas infantilizadas.
Quienes quieran adentrarse en la religión
del Islam, porque no tengan bastante con lo dicho, pueden leer a Raad
Salam Naaman. Pero también el libro ‘Palabras
para Ashraf’, para que vean lo que son capaces de hacer.
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'El séptimo círculo del infierno'
'La Guerra Civil y la Tercera España'
'Cantos al camino'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'El séptimo círculo del infierno'
'La Guerra Civil y la Tercera España'
'Cantos al camino'
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