viernes, 4 de octubre de 2024

Alvise y el estafador

 

Sé de un estafador que votó a Alvise. Ese estafador me tiene por tonto. Pero él, que conoce mis cuitas, debería haberse dado cuenta de que si yo fuera como Alvise no habría logrado sobrevivir. Si no ha sido capaz de comprender eso es que el tonto es él.

Tuve trato con Alvise por WhatsApp. Fue él quiso relacionarse conmigo. Solo pudo haber un motivo para que eso ocurriera y es que Rosa Díez fue uno de los veintisiete personajes que colaboraron en 1978. El año en que España cambió de piel. No fue el único, otros muchos que también estaban en UPyD, como él, hicieron lo mismo. Cuando desapareció el partido todos esos también volaron. Creo que fue una suerte, porque vaya tela. Qué cantidad de aventureros dispuestos a todo y a aprovechar cualquier oportunidad para hacer carrera. Yo nunca he estado afiliado a UPyD, ni he pedido, ni pretendido nada de este ni de ningún otro partido. Tampoco he podido influir jamás en Rosa Díez. Otra cosa es que tuviera, esporádicamente, trato con ella, pero sin más intención que comentar algunas cosas del momento. Recibió muchas traiciones, algunas bastante sonadas y me preocupó que eso la pudiera afectar.

Alvise entonces estaba en el Reino Unido, me dijo que trabajaba en el consulado español de la ciudad en la que estaba, creo que Leeds, y es posible que fuera cierto, pero tengo la impresión de que me contó más de cuatro mentiras, que a mí ni me van ni me vienen, y esa pudo ser otra de ellas. Tenía mucha fe en el partido y quería trabajar para España, y enseguida se apuntó a Ciudadanos. Me enteré por la prensa y se lo pregunté y me respondió que sí, que para servir a España. Y esa fue la última vez que me contestó. Ya luego estuvo en Valencia como asesor de otro elemento de cuidado. Dios los cría y ellos se juntan.

Esos libros míos

jueves, 3 de octubre de 2024

El embajador de Irán se marca un farol

 

Mientras Reza Zabib, embajador de Irán en España, amenaza a Israel, Al Jamenei se ha ido a esconder. Quizá en el cementerio, pensando que ahí no lo van a buscar.

No me sorprendería que la mayoría de los iraníes esté deseando que los israelíes lo encuentren y los libren de esa pesadilla. Ellos, que deben de estar deseando volver a la civilización, se ven obligados a vivir en el pasado, por culpa de unos cafres aficionados a dar latigazos, asesinar y dar uso indebido a las nobles grúas.

Tampoco se entiende que estos tipos que prometen un paraíso lleno de huríes a sus fieles, no estén ansiosos por ganarse el suyo y prefieran encerrarse en escondrijos. Podría darse el caso de que algún iraní descubriese accidentalmente la madriguera y corriese a chivarse.

Donde había un desierto, ahora hay un vergel. También lo hay en los campos de la ciencia. Y civilización. Israel es una democracia. Al margen de cualquier otra consideración u odio ancestral, la propia existencia de Israel muestra el fracaso del Islam. Los clérigos musulmanes tienen que desviar la mirada de sus súbditos, porque si hubiera paz en la zona la comparación sería inevitable. El odio impide ver. Gastan mucho dinero en propagar y justificar el odio a los judíos. Los provocan, para que no tengan más remedio que responder. Utilizan escudos humanos, para que les sirvan de base para las caras campañas propagandísticas.

Claro que Israel quiere la paz, pero a los musulmanes no les interesa. Israel sabe que para sobrevivir tiene que defenderse. Y el embajador de Irán en España sabe que puesto que su país le ha lanzado decenas de misiles Israel contestará al menos con el mismo número, solo que más certeros.

Al Jamenei también sabe que los israelíes están intentando averiguar su paradero. Se habrá llevado el móvil dentro de varias capas de material aislante y cada vez que lo saque para mirar algo tendrá diarrea.

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miércoles, 2 de octubre de 2024

Olor a podrido en México

 

Tanto Andrés Manuel López Obrador, AMLO, como Claudia Sheinbaum están demostrando una falta absoluta de sentimientos y de convicciones democráticas con su actitud ante la sanguinaria brutalidad de Maduro en Venezuela, y de falta de educación, sensatez e inteligencia en su trato con España.

Se evidencia con ello que el bienestar de los mexicanos no les importa nada a ninguno de los dos, sino que su objetivo es engañarlos para que los voten. Piensan que mientras los mantengan hipnotizados con señuelos idiotas, pero que han venido funcionando hasta el momento, no notarán su incompetencia y podrán disfrutar de los placeres del poder, aunque México vaya de mal en peor.

Cuentan también con otra ventaja. Ningún gobierno puede subsistir si tiene la población en contra. Por eso ellos procuran engañarla, pero por si falla el engaño, tienen el apoyo de las demás dictaduras de izquierda, que es lo que mantiene, por ahora y esperemos que por poco tiempo, a Maduro.

Apesta que antes de dejar el poder AMLO haya eliminado la separación de poderes. En un país en el que corrupción es endémica, los ciudadanos quedan absolutamente desprotegidos ante los abusos del poder.

Por su parte, Gustavo Petro, el guerrillero reconvertido en político, aprovechando la relatividad moral introducida por el movimiento woke, que no oculta sus simpatías por Hasán Nasralá, se enorgullece de que Claudia Sheinbaum formara parte de las FARC en su día.

Pero no todo es podredumbre, crueldad y sadismo, también hay motivos para el regocijo. Hay indicios de que Iberoamérica empieza a despertar. Cada vez son menos los gobiernos comunistas, y en donde persisten tienen graves dificultades. Maduro resiste como gato panza arriba, pero tiene al ochenta por ciento, si se cuenta a los de la diáspora, de los venezolanos en contra.

La situación en México podría ser parecida. Según afirma Eduardo Novoa

https://youtu.be/DcPasPZ5DG4?si=hRoedHrjoxsGZjnp, el triunfo de Claudia Sheinbaum no fue tal. El historial de los personajes no invita a desechar sin más sus palabras.

Esos libros míos

martes, 1 de octubre de 2024

Lo de Loquillo

 

Hay un ambiente insano en Cataluña. Todo parece indicar que Loquillo tomó un taxi y que su conductor se dirigiría a él en catalán y que el cantante, en el uso de su prerrogativa como cliente le pediría que le hablara en español, como consecuencia de lo cual y aprovechando el ambiente enfermizo se le exigiría que abandonara el vehículo.

No terminó ahí la cosa, porque un periodista afirma que fue el siguiente en tomar ese mismo taxi, lo que puede no ser cierto, y que fue informado de que Loquillo exigió con malos modos -esto también puede ser un invento- que le hablara en español. El chivato pudo haber telefoneado a una redacción o a ese periodista concreto para activar el odio hacia quienes no se someten a la dictadura catalanista.

La prueba de que el ambiente es insano y enfermizo es que son muchos los que han arremetido contra el cantante en las redes, dando por buena, sin más, la peor de las versiones y dando por descontado que el taxista tiene el derecho y la obligación de dirigirse a los clientes en catalán y este pasajero concreto, puesto que es famoso, tiene también el deber de contestar en la misma lengua.

Si no hubiera sido famoso, no habría habido caso. El taxista le habría contestado en español para no perder una carrera. Puesto que era famoso, el chivato calculó que saldría ganando, como así será seguramente, pues es muy posible que le den una medalla.

Moralmente, su actitud es detestable, como también lo es la de quienes también lo han aplaudido de forma tribal.

Estamos en el siglo XXI, en el que el comportamiento civilizado y responsable debería ser una constante, y ocurre que hay una regresión, una apuesta por la brutalidad y el salvajismo.

Cambiaré de asunto para poner la nota de humor. Resulta que Pedro J. Ramírez, en su artículo Los peldaños torcidos de Illa, dice textualmente que este es el primer molt honorable filósofo. Que tenga la carrera de filosofía no significa que sea filósofo. Y lo de honorable, pues…

Esos libros míos