A bastantes de los autodenominados
socialistas les gusta dárselas de muchas cosas que luego no son.
Verbigracia, los hay y no pocos que se creen socialistas, pero
bastaría con pedirles que definieran el socialismo para comprender
que no lo son.
Abundan entre ellos también los
buenistas, o sea, que les gusta parecer buenos. Ojo, no ser buenos,
sino parecerlo. Eso se consigue con el dinero ajeno y poniendo en
riesgo el bienestar, conseguido con un esfuerzo, acompañado de
sacrificio, durante muchos años. Y a quien manifieste algún reparo
sobre la cuestión inmediatamente se le tilda de racista o fascista,
con lo cual se ve claramente que la bondad sólo en la capa de las
apariencias, por debajo de la cual están los puñales traicioneros y
las hachas de decapitar.
Próximamente, en el Reino de Valencia,
cuyo nombre oficial es Comunidad Valenciana, porque ofende menos a la
izquierda, se va a implantar la enseñanza de la religión musulmana.
O sea, una religión cuyo nombre, Islam, significa sumisión. ¿Esto
es lo que quieren que aprendan los alumnos valencianos los
gobernantes de hoy?
En ‘1978. El año en que España cambió
de piel’, escribí que en la Constitución no debería figurar
ninguna religión, ni ninguna lengua oficial, porque ello daba pie a
que en el futuro otras religiones exigieran un trato similar y otras
regiones introdujeran en sus Estatutos de Autonomía otras lenguas o
dialectos.
Los contribuyentes, o sea, los que con su
dinero mantienen al Estado, tienen derecho a hablar y aprender la
lengua que se les antoje y no la que les ordene el Torra de turno.
También tienen derecho los contribuyentes a que el Estado les
proteja en la medida en que sea posible de los estafadores y no cabe
duda de que algunas religiones son una estafa.
Haría muy bien el Estado en decir que le
asombra que la Iglesia Católica hable de Misterios, pero todavía le
asombra más que para el Islam y los Testigos de Jehová no existe el
bien y el mal, sino la voluntad de Dios.
'2016.Año bisiesto'
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Diccionario de elogios, piropos y voces galantes'
'Atlas del bien y del mal'
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Diccionario de elogios, piropos y voces galantes'
'Atlas del bien y del mal'
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