miércoles, 31 de octubre de 2018

Riverita se cambia de bando

Estos politiquillos luego nos quieren hacer creer, como si fuéramos tontos, que todo lo hacen pensando en el bien de los ciudadanos. Y una porra.
Riverita debe de haber visto que en el caladero del PP cada vez pesca menos y ha optado por tender las redes en el del PSOE, ya que como Sánchez lo ha llevado a la extrema izquierda puede conseguir adhesiones entre los socialistas moderados, que son muchos.
No le importa pervertir el sistema democrático. Las reglas de juego son las que son y no se las puede calificar de restrictivas puesto que permiten medrar a torras, rufianes, urcullus, etc. Si a Sánchez no le gusta la composición del Senado, que alguno de sus impresentables socios ha calificado de espuria, tiene la potestad de convocar elecciones, que es el medio previsto para que cambie.
A Riverita le preocupa que lo confundan con Casado, como le ocurre a Sánchez, por ejemplo, pero es que éste no ve dos a caballo de un burro, y tres tampoco, como lo prueba que dijera que la política va mejor y la economía va bien. La política no puede ir mejor, porque depende de lo mejor de cada casa, podemitas, bildutarras y golpistas. En cuanto a la economía, lo cierto es que por este camino se aproxima una catástrofe de proporciones considerables, como intentaron advertirle los empresarios en el Palacio de Congresos de Valencia. Claro que a él y a sus ministros eso les da igual. La disyuntiva para ellos es la siguiente: o siguen la senda iniciada o dejan el gobierno, y a eso sí que no están dispuestos.
Solo faltaba que Riverita lo ayudase perpetrar tamaño desafuero, simplemente para marcar diferencias con el PP. No es extraño que lo haya hecho, porque Ciudadanos en su origen era socialista sin mezcla de nacionalismo. Luego se hizo de derechas y asumió algo de nacionalismo, y ahora intentará parecerse al PSC, nacionalismo incluido.

martes, 30 de octubre de 2018

La Generalidad promueve la delación

A los sinvergüenzas que mandan en Cataluña no les importa envilecer a la población. Lo llevan haciendo tanto tiempo que dar una vuelta de tuerca más no les cuesta nada.
Su desparpajo llega al punto de que usan con total desenvoltura los métodos propios de cualquier dictadura de las que son o han sido en el mundo y, sin embargo, manejan la palabra ‘democracia’ como si fueran sus dueños, como si los antidemócratas fueran los que no se tragan sus patrañas, los que siguen firmes en sus convicciones.
Lo preocupante es que en nuestros días, cuando hay tanta información al alcance de un solo clic, al personal le da pereza comprobar las cosas e informarse. La delación es una de las mayores vilezas que se pueden cometer. Que sea correcto hacerlo con un delincuente no da pie a generalizarlo a todas las actividades humanas.

Tratar de borrar el español de Cataluña (también se está intentando o se desea intentar en otros lugares) es otra vileza y además una estupidez. Es imposible borrar una lengua por la fuerza aparte de que en Cataluña se viene hablando en español desde hace siglos. Es una lengua perfectamente arraigada en la región, como en todas las demás de España, y ningún nacionalismo logrará jamás revertir esta situación. Por otro lado, obligar a la población a aprender una lengua es contraproducente, porque cada uno usa la lengua que más le conviene y aprende las que más le interese. Por ejemplo: un pensionista extranjero que viva en Benidorm no necesita aprender español y si le obligaran a hacerlo podría irse a otro país; en cambio, a un extranjero que trabaje en Benidorm le ha de interesar aprender español.
Nunca ha hecho nada bueno el nacionalismo y no está lejano el día en que sea prohibido en todo el mundo, como ya lo están el fascismo y el nazismo, que le son tan próximos en la ideología y en los métodos.

lunes, 29 de octubre de 2018

Ada Colau es una fábrica de monárquicos

En lugar de dedicarse a hacer que Barcelona resulte más habitable y amable, procura todo lo contrario, que resulte agobiante para los que no le votan. Este es el concepto de democracia que tiene esta señora que, con gran desparpajo, siempre tiene esta palabra en la boca.
No vivo en Barcelona, sino en otra ciudad gobernada por alguien tan sectario como Ada Colau, pero si viviera en la Ciudad Condal no es que no quisiera votarla, es que no podría. No puedo votar a alguien que va en contra de la ciudad, que no tiene reparos en causarle perjuicio. Lo penúltimo ha sido la reprobación del Rey. Urge recortar las competencias a los ayuntamientos. En la concesión de licencias de obra, porque puede haber mucho dinero en juego y un ayuntamiento honrado no puede enfrentarse a grandes empresarios, si éstos tienen más codicia que escrúpulos, y si el ayuntamiento no es honrado pues peor. Y habría que prohibirles también hacer el chorra, como es el caso de Colau en el caso anteriormente citado, pero no solo ella y tampoco nada más ese caso. En Valencia, por ejemplo, le han quitado la calle a Castañ Tobeñas, pero no solo a él.
Parafraseando una chorrada de los catalanistas, de todos, se puede decir que Colau es una fábrica de monárquicos. Un ataque tan injusto y estúpido no debería tener más consecuencia que la de estimular la solidaridad y la simpatía con el Rey. Unos patanes han intentado ofender a Su Majestad.
También Torra es una fábrica de monárquicos. Al presidente de la Generalidad se le llama, pomposamente, Muy Honorable. Eso debería quedar en el pasado, el título que le corresponde y le cuadra es el de Muy Mamarracho, pero, eso sí, perteneciente a una raza ‘superior’, altamente desarrollada en el menosprecio al resto del mundo, el racismo, y la tendencia al ridículo.

domingo, 28 de octubre de 2018

Pedro Sánchez asalta el Olimpo

Aunque quizá debería haber dicho el Olimpo y la Olimpa, para estar a buenas con los dictadores de hoy, con los censores que siempre los mismos, lo que cambia es el objeto que persiguen.
El caso es que este presidente tan despabilado que tenemos, este aprovechategui, para entendernos, no tiene bastante con ser presidente de España y ha asaltado el Olimpo. Es como si les hubiera dicho a los dioses: ¡quitaos, que voy yo! Él, él solito, aunque diga que lo han ayudado, ha trazado los retos del futuro en el contexto digital: https://twitter.com/sanchezcastejon/status/1055476954349101056.
Patidifusos se habrán quedado Zeus, Hera, Atenea, Artemisa y todos los demás, pero se habrán tenido que ir, claro, como antes se tuvo que ir Rajoy, y aun más pronto Susana Díaz, que ya se ha rendido del todo, a la vista de que su antaño rival está dispuesto a no dejar clavo ni estaca en pared.
Los dioses también se habrán dado cuenta de que a quien no le deje paso libre para hacer lo que quiera, ya no le habla, rompe relaciones y a otra cosa, mariposa.
Ahora bien, si son de Bildu, o sea, gentes de paz, como Otegui, según dejó establecido Zapatero, que no asaltó el Olimpo ni la Olimpa, porque no se le ocurrió, Pedro Sánchez no rompe relaciones. ¡Faltaría más!
Tampoco las rompe con los golpistas. O sea, que los necesita para respirar. ¿Cómo las va a romper? Jamás nadie ha visto a Pedro Sánchez chuparse el dedo.
Ni con Podemos, esos comunistas boliviaranos, a cuyo líder hay que cuidar y ponerle guardaespaldas las 24 horas del día. No son matones que defienden a los ricos, sino trabajadores que cuidan de unos ‘benefactores’ de la humanidad.
Tampoco va a romper con ERC, que tiene a un Rufián y a un Tardá que le permiten sentirse inteligente.
En fin, hay gente con la que riñe y gente con la que no, al estilo de los dioses.

viernes, 26 de octubre de 2018

No te creo, Tezanos

A estas alturas ya todo el mundo es consciente, o debería serlo, de que estos socialistas de hoy con tal de tener el gobierno son capaces de cualquier cosa; se puede asegurar que el PP, UpyD, Ciudadanos o Vox jamás habrían pactado con esos que sí lo ha hecho el PSOE; por eso las encuestas de Tezanos resultan sospechosas.
El caso es que podría ser verdad lo que dice este señor del que no se fía nadie, sobre todo desde que fue nombrado para ese cargo. Ya dijo Churchill que el mejor alegato contra la democracia es una charla de cinco minutos con el votante medio. Además, tenemos la experiencia de Zapatero, tan nefasto y sin embargo hasta que los votantes no comenzaron a arruinarse o quedarse sin trabajo no le retiraron su favor.
Zapatero estaba perjudicando a los españoles y una mayoría suficiente de éstos le votaba. Algunos de su partido no estaban conformes con su labor, pero eran pocos y no pudieron detener la debacle. Recuerdo a uno especialmente, Pedro Aparicio, que fue crítico con Zapatero desde el primer momento. Este señor, que fue alcalde de Málaga, era culto, educado, inteligente, melómano… Si viviera ahora estaría escandalizado con Sánchez. La revista El Jueves diría que está como una cabra, Rufián le tiraría pullas, a éste no se le pueden suponer más que mezquindades, Torra diría de él que es una bestia con forma humana y Ábalos le obsequiaría con un desprecio descomunal.
Algunos columnistas de derechas, o que escriben en medios de derechas, vienen vaticinando desde hace algún tiempo que Sánchez gobernará durante unos cuantos años. Han olvidado el caso de Zapatero. Habría podido gobernar durante muchos años, porque caía mejor al público que Rajoy, pero su torpeza y su maldad propiciaron la crisis económica que le obligó a dimitir. La que se está gestando con Sánchez es más grave todavía.

jueves, 25 de octubre de 2018

Pablo Casado ganó el debate

Su oponente podría haber respondido que no es verdad que se haya aliado con los golpistas con tal de conseguir la presidencia del gobierno, ni con los podemitas, ni mucho menos con Bildu, pero, lejos de eso, optó por dar por perdido el debate, puesto que toda su respuesta consistió en romper las relaciones.
Pero debe saber Pedro Sánchez, el ‘doctor’ Guaperas, que también las ha roto conmigo, puesto que estoy totalmente de acuerdo con lo que le dijo Pablo Casado.
Cuando el actual presidente del gobierno se atrevió a decirle, precisamente él, el menos indicado para ello, a Mariano Rajoy «usted no es una persona decente», éste no rompió las relaciones con él, porque estaba en condiciones de responderle adecuadamente, y lo hizo.
Cuando Torra, ese tipo infame que preside el gobierno catalán como títere del gallináceo Puigdemont, lo chulea, no rompe relaciones con él, todo lo contrario: tú puedes decirme lo que quieras, cariño, que para eso estamos. Por supuesto que para Sánchez Torra no es de extrema derecha, ni Pablo Iglesias y él de extrema izquierda. Los tres, Torra, Sánchez e Iglesias, se pasan la democracia por el forro, pero se dicen demócratas. La extrema derecha es Vox, para ellos, y si se descuida, Pablo Casado.
Se nos viene encima una crisis económica brutal, propiciada por las políticas que Iglesias le ha impuesto a Sánchez y si se lo reprochan a éste la respuesta que da es romper relaciones. Así es como cuida este guaperas tan ambicioso que no puede ser más los intereses de los ciudadanos.
Montero e Iglesias, con la proverbial cara dura que les caracteriza, se reían al ser aludidos por Pablo Casado. Se reían. Saben que cualquier cosa que diga alguien del PP, por muy comprobada científicamente que esté, a sus votantes les entra por un oído y les sale por el otro. Pero la crisis que se nos avecina a quienes más daño hará será precisamente a buena parte de los votantes de Podemos.

miércoles, 24 de octubre de 2018

Los podemitas y Rosa Díez

Tienen tan distorsionada la lente a través de la cual miran que catalogan a Rosa Díez como de derechas, lo cual tampoco tendría nada de malo si fuera cierto. E incluso son capaces de situarla en la extrema derecha, espacio político en el que tampoco les costaría nada situar a Alfonso Guerra, si se terciara.
Los podemitas quieren destruir todo lo que da cohesión al país, empobrecer todo lo que puedan a la gente, para que así tenga más odio y resentimiento y manipularla mejor, para hacer ellos lo que quieran: vivir en casas de lujo, y saltarse las leyes, como es el caso de Echenique -el hombre que encontró El Dorado en España-, pongamos por caso.
Los podemitas son comunistas, son de extrema izquierda, y nada de lo que proponen o pretenden hacer puede traer nada bueno para nadie que no sea uno de sus dirigentes.
Claro que Rosa Díez se ha dado cuenta de lo que pretenden estos tunantes, con la complicidad del ‘doctor’ Guaperas, que para una vez en la vida que da sangre lo ha hecho con publicidad extrema. Habrá que ver cuando y cuantas veces repite la experiencia. El caso es que quien realmente manda en el gobierno y va cumpliendo sus objetivos es el coletas, mientras el astronauta disfruta en el cieno, quizá más que antes en el espacio, y Marlasca (omitiré el calificativo que le dedicó ‘la’ Dolores) destituye a quienes no le son absolutamente afines.
Claro que Rosa Díez se ha dado cuenta de la catástrofe que se nos viene encima, y lo viene denunciando mediante artículos en los medios. Si en su etapa política luchó brava y eficazmente contra la corrupción, ¿por qué tendría que callar ante esta corrupción mayor? Los podemitas tienen que utilizar todos los medios a su alcance, siguiendo las técnicas de los bolcheviques para minimizar la influencia de quienes, por tener los ojos abiertos, han visto sus intenciones.

martes, 23 de octubre de 2018

Las excusas de nuestro astronauta

Pedro Duque, nuestro astronauta favorito, orgullo que fue de los españoles, se sintió ofendido porque salió a relucir que es dueño de la sociedad mediante la cual podría haber reducido el pago de impuestos.
Como consecuencia, encargó un estudio a unos amigos según el cual no solo no evadió impuestos merced a esta sociedad, sino que pagó más que si no la hubiera tenido.
Dando por bueno este informe, ocurren algunas cosas. En primer lugar, es normal que la gente quiera pagar menos impuestos y se sirva de su ingenio para lograrlo, sobre todo si se tiene en cuenta que el Estado usa ese dinero para sufragar televisiones impresentables, embajadas regionales, dádivas a los sindicatos y otros dispendios cuestiones. El problema viene dado por lo que dijo su señorito, Pedro Sánchez, el ‘doctor’ guaperas, sobre el particular.
En segundo lugar queda la cuestión importante. Causa extrañeza que se haya sentido ofendido por ese motivo y no por lo que dijo en su día la persona que lo nombró ministro luego, pero sobre todo que siendo tan tiquismiquis no le haya importado formar parte de un gobierno al que apoya lo mejor de cada casa, Podemos, Bildu, golpistas…
Este astronauta nos está fallando lastimosamente. No es lo que pensábamos. Y luego ocurre que según el gobierno del forma parte va dando pruebas de deslealtad al Rey, desprecio hacia los españoles, trasladando presos peligrosos al País Vasco y a Cataluña, permitiendo que aliados suyos visiten a los golpistas en la cárcel y que sean éstos determinantes para su acción política, permitiendo que le visite en la Moncloa un tipo despreciable con un churro amarillo en la solapa, etc., y todo esto no le ha generado la menor preocupación. Lo de ser ministro le llena, aunque sea a cambio de hozar en el cieno. No tenía bastante con ser astronauta. De las alturas ha ido a parar a lo hondo.