sábado, 31 de marzo de 2018

Colau arruina a Barcelona

Hace muy bien el PP en pedir que sea ella quien pague la indemnización de 801183 euros a la cadena hotelera que resultó perjudicada por actuaciones suyas, de Colau.
Los demás partidos, que supuestamente deberían defender los intereses de los contribuyentes, han aceptado que sean ellos quienes corran con los gastos de los desmanes de su alcaldesa, aunque cuando ocurrieron los hechos ella todavía no tenía el cargo, sino que ejercía como okupa, motivo por el cual la empresa a la que hay que indemnizar resultó perjudicada.
Y esta señora que, también supuestamente, defiende los intereses de los más pobres, o eso es lo que proclama, ha decidido quitarles la enorme cantidad citada al principio, para pagar algo de lo cual es responsable ella, al menos una de las responsables, porque no era la única ocupa.
De modo que el PP, partido al que acusan de defender a los ricos, el que realmente está defendiendo a los pobres, al negarse a que su dinero se gaste indebidamente.
Y es lógico que sea el PP el que se comporte de ese modo, porque en su día, en 2007, también fue el único que actuó de modo consecuente, en defensa de la legalidad, con la oposición de todos los demás.
En aquel momento, los demás partidos pretendieron darle un trato de favor a Colau, ofreciéndole una alternativa a cambio de que dejara de okupar ilegalmente la casa en la que estaba, y el PP fue el único que se opuso. Es inconcebible que se premie al delincuente.
Curiosamente, Colau, que defiende que se puedan okupar viviendas de particulares vacías, gasta mucho dinero, también público, en evitar que se haga lo mismo en las de titularidad municipal.
Quizá ella sepa, y no le importe, que sus ideas perjudican a los pobres más que a nadie.

viernes, 30 de marzo de 2018

Tú tranquila, Rahola

Estate tranquila, Rahola, porque la fregona ya está en el cubo. De momento, está a buen recaudo y hay unos abogados que se están frotando las manos, porque van a poder presentar una buena minuta.
A la vista de los antecedentes, tengo derecho a pensar que seré uno de los que contribuirán, con sus impuestos, a pagarla.
Aunque cabe presumir que lo que le preocupa a Rahola no es la suerte de Puigdemont, sino la repercusión que tenga en ella, puesto que sus emolumentos corren peligro. Se comporta como una posesa, hace el ridículo una y otra vez, es motivo de risa para la gente normal, pero esas cosas son gajes del oficio para ella. Hay una masa descerebrada y enloquecida, que se cree las actuaciones teatrales de esta señora y que lo suyo es dignidad y que defiende una causa justa. ¡Y tan justa! Su cartera.
Más o menos como el Torrent ese, que tiene cara bobo, pero que está consiguiendo engañar a los mismos que ella. Hace creer que está en contra del Estado y que se solidariza con los presuntos delincuentes, pero en realidad se cuida muy mucho de no dar un paso de más. Con esos simulacros no puede engañar a nadie que no desee ser engañado.
Parece ser que a Rufián, que es otro de los que juegan a lo mismo que los dos anteriores, ya le han pillado el juego algunos que, ¡por fin!, se han dado cuenta de que lo que le gusta es tirar traca a la hora de la siesta, para que los gamberros le rían la gracia y le voten.
Los mismos que están encerrados se defienden ante el juez alegando que todo era broma y que no tenían ninguna intención de llevar a cabo lo que pregonaban, alguno ha dicho incluso que reza mucho, como si eso fuera relevante.
Lo de rezar también es una sugerencia para Rahola. Calma mucho.

jueves, 29 de marzo de 2018

El NY Times contra la democracia

Pide este medio a Alemania un gesto conciliador con respecto al fugitivo Puigdemont, que tanto daño ha hecho a hecho a Cataluña.
Olvida este medio que no es de Alemania la responsabilidad, sino de un juez, que tampoco debe dejarse llevar por su opinión, simpatías o antipatías, sino que debe ajustarse a lo que marca la ley.
En un tiempo ya lejano, los jueces de Estados Unidos fueron tenidos como faros por los del resto del mundo. Entonces ellos creían que su país era el más recto del mundo y obraban en consecuencia. Cuando se dieron cuenta de que no era así, comenzaron a corromperse ellos también y hoy quizá puedan dar lecciones en este particular. Particularmente, he tenido con un percance muy revelador con un abogado estadounidense, que además preside una sociedad, a la que no pienso pagar más cuotas. Hacerlo en un lugar en el que el presidente, en un alarde de incultura, grosería y sin demostrar ni una pizca de amor por la justicia, me ofende, ante la mirada indiferente de los espectadores, al modo que explicó Aurelio Arteta en ‘Mal consentido’ , no me parece una decisión inteligente.
Todo esto que va ocurriendo me hace pensar en Don Quijote, cuya naturaleza es difícil que logren comprender los beocios. Ese empeño suyo en defender a los oprimidos, en alzarse contra los atropellos, enfrentándose sin dudarlo ni un segundo con quien hiciera falta, no puede ser entendido por los espíritus mezquinos.
Don Quijote estuvo en Cataluña, pero su paso por esa región no sirvió para infundir a sus pobladores ese espíritu grandioso que le caracteriza, esa solidaridad con el mundo, esa generosidad en el trato, ese deseo de grandeza, esa nobleza en el proceder, sino que al menos dos millones de ellos, en los que se apoya el fugitivo de la justicia, gustan de la traición, el egoísmo y la mezquindad.

miércoles, 28 de marzo de 2018

UGT y CC.OO. a favor de los golpistas

Hay unas personas encarceladas porque así lo ha decidido una instancia del Estado en virtud de un procedimiento legal, que rige para todos, y estos sindicatos que también son parte del Estado, porque sin las subvenciones serían incapaces de sobrevivir, se han revuelto contra él.
La pregunta del millón es: ¿Han devuelto lo cobrado y han renunciado a seguir cobrando las subvenciones antes de adoptar esa decisión? Porque si hay algo que protege a un trabajador es la ley. Si los sindicatos exigen que no se cumpla la ley ponen el peligro a los trabajadores.
La otra cuestión es el hecho de que los sindicatos sean subvencionados. Si el Estado les garantiza los ingresos no necesitan defender a trabajadores para ganárselos y que paguen una cuota. De donde resulta que la función sindical queda pervertida. Sólo faltaba que además se revuelvan en contra de quien les paga, que es el contribuyente.
El trabajador español soporta muchas cargas, porque no sólo están subvencionados los sindicatos, sino también la patronal, los medios (con lo cual pueden dedicarse a manipular más que a informar) y además de todo eso hay otra realidad, la de que en España hay más políticos por metro cuadrado que en ningún otro país del mundo, y si se tiene en cuenta que por político se entiende a Gabriel Rufían, o sea, que este tipo es representativo de un bueno número de ellos, la cosa clama al cielo. Pero el contribuyente español soporta todo eso como si fuera correcto, como si tuviera que ser así.
Afortunadamente, la iniciativa de CC.OO. y UGT quedará en agua de borrajas. La fregona está en el cubo y puede que otros sigan el mismo camino, cabe la posibilidad de que Torrent, al final, también acabe en el trullo, porque va haciendo méritos para que le den de comer. A estos sindicatos cabe recomendarles que se disuelvan y den paso a otros, con otras maneras y otros modos de financiarse menos onerosos para los trabajadores.
'2016.Año bisiesto' 
'El Parotet y otros asuntos'

'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Brillo de asfalto'
'La piel del deseo'

martes, 27 de marzo de 2018

The Times, al nivel de La Vanguardia

La característica del Reino Unido es la hipocresía, aunque eso no significa que la envidia y los demás vicios estén ausentes en sus territorios.
Cuando se lo han podido permitir, los británicos han dado muestras de nobleza y de amor a la justicia, pero cuando les ha convenido se han comportado como Gabriel Rufián, y luego presumen de lo primero y callan lo segundo.
El Reino Unido ha hecho mucho mal en el mundo. Sin su participación, la Guerra de Sucesión española no habría tenido lugar o habría durado muy poco. Es ahí donde surgió el nacionalismo catalán. El archiduque Carlos, con el fin de ganarlos para su causa, prometió un montón de cosas, que seguramente no pensaba cumplir, a los catalanes que, en primera instancia, habían recibido con fervor y aceptado a Felipe V. Cuando al Reino Unido ya no le interesaba esa guerra, la abandonó, tomando Menorca y Gibraltar. No sólo hizo daño, sino que además se cobró un botín.
Los catalanes luego añoraban aquello que les había prometido el archiduque Carlos y que a causa de que el Reino Unido los dejara en la estacada no obtuvieron. Ahí comenzó también el progreso de Cataluña. Felipe V se sintió obligado a favorecerles, a costa de los demás, claro. El crecimiento de esa región fue espectacular durante su reinado.
Ese egoísmo tan práctico de los británicos que les ha llevado a hacer todo el mal que han podido, en donde han podido (exterminaron a los nativos de América del Norte), si ellos podían sacar algo a cambio, sin que por ello merme su convicción de que son los más justos y nobles del mundo, les llevó a que el Reino Unido fuera el país más poderoso del mundo, pero llevan dentro la semilla del mal, que se ha vuelto contra ellos. Con el Brexit, por ejemplo.
Siguen disfrutando si pueden perjudicar a otros y ahí está el Editorial de The Times, que ha renunciado a informar a sus lectores para dar rienda suelta a su querencia natural.

lunes, 26 de marzo de 2018

Alemania no es Bélgica

Qué comportamiento tan distinto el de un país y otro. Por otro lado, estará contento el Mocho, Puigdemont. Que un chisgarabís como él, insolvente moral e intelectualmente, cuya capacidad de raciocinio es cuanto menos dudosa, sea portada en todos los medios del mundo no es para menos.
Se han solidarizado con él Otegui, Rahola y compañía, y supongo que algún obispo o cardenal, y Artadi, otra que tal. Lo mejor de cada casa.
Han pillado al pillastre y ahora sus simpatizantes, tan limitados e infantiles como él se dedican a destrozarlo todo, sin darse cuenta de que con eso ayudan a sepultar para siempre al independentismo, que hace ya algún tiempo que está muerto, exactamente desde que optó por una vía imposible. Hay que repetirlo muchas veces, por ni aún así la realidad es vista por la mayoría, incluso hay sesudos comentaristas que creen que sigue vivo y que renacerá.
No puede ser que unas personas que cobran del Estado, porque son parte de él, se rebelen impunemente contra quien les paga. Si tanta necesidad tuvieran de independencia cogerían la escopeta y se irían al monte. La realidad es la que es y quienes no la quieren ver se estrellan contra ella.
Esos que están destrozando Cataluña serán vistos por los catalanes del mañana como unos canallas. Los catalanes de pasado mañana pensarán de ellos que fueron unos cretinos. Sus fotos serán contempladas con una mezcla de desprecio y guasa. ¿Qué podrá pensar un catalán dentro de veinte años nada más, cuando quizá algunos de esos sediciosos estén todavía en la cárcel y compare la situación de Cataluña en los años noventa con la que haya entonces, que será bastante inferior? Verá las fotos de Junqueras, Puigdemont, Mas, Rahola, Forcadell…, y no comprenderá, a la vista de la torpeza que emana de sus rostros, que hayan llegado a ser tan decisivos, para mal, en la historia de Cataluña.


domingo, 25 de marzo de 2018

Elsa Artadi, digna sucesora de Puigdemont

Esta señora viene demostrando que es tan beocia como su mentor, cuya mayor habilidad es urdir engaños y hacer pillerías, como si la vida fuera un juego, como si causar tantos perjuicios tuviera que salirle gratis.
Inés Arrimadas hizo una petición un tanto fuera de lugar, rogó que los secesionistas la saludaran, y digo que está fuera de lugar porque a mí particularmente no me gustaría que me saludaran esos. Unas personas que han causado o ayudado a causar tantos perjuicios a los ciudadanos y no sólo a los de ahora, sino que el daño causado alcanzará a las generaciones futuras no me gustaría que me saludaran, porque con ello me obligarían a devolverles el saludo.
El caso es que la sugerencia de la portavoz, portavoza diría alguna cenutria, de Ciudadanos dio pie al roznido de Elsa Artadi "Cuando envías a personas a la cárcel y lo importante es saludarse porque es de buena educación. Ahora mismo en el Parlament…".
Que esta mujer esté cobrando un sueldo público es un insulto a los contribuyentes. Forma parte del Estado, que es quien le paga, y por tanto debería saber que quien manda a alguien a la cárcel es un juez y no puede hacerlo de forma caprichosa, sino que tiene que tiene que justificar su acción explicando cuales son las leyes que a su entender ha violado el presunto delincuente, que tampoco está indefenso, puesto que necesariamente ha de contar con asistencia letrada.
Quienes actúan de manera caprichosa no son los representantes de la ley, cuyas actuaciones se rigen por unas normas y procedimientos que cumplen escrupulosamente, sino precisamente quienes violan esas normas y procedimientos, que están obligados a conocer, y a las que cobrando su nómina todos los meses se someten. Parece ser que Elsa Artadi se lleva un buen pellizco cada mes, o sea, que es tonta para unas cosas y no para otras.

sábado, 24 de marzo de 2018

La utilidad de TV3

Resulta cuanto menos curioso que ahora que tanto se habla de las pensiones que a nadie se le ocurra pensar en cerrar las televisiones regionales. De hecho, Pedrito Sánchez, que pretende cargar la revalorización de las pensiones sobre las espaldas de los trabajadores, y Riverita, cuando la aplicación del 155 protegieron a la TV3.
¿Para qué sirve ésta? Pues para lo mismo que todas, para derrochar dinero a manos llenas, pero aventajando en mucho a las otras en este aspecto, y para hacer el mal, sobre todo para hacer el mal.
Hay más cosas que se pueden suprimir y se hiciera nadie se daría cuenta, porque su utilidad es nula. En realidad, el personal se daría cuenta al ver que bajaban los impuestos y que había más dinero circulando y, por tanto, se creaba más empleo.
Puesto que hace años que no veo la televisión, me entero de lo que hace por los medios y lo que cuentan de los numeritos que monta en la TV3 Rahola es obvio que cerrarla sería un acto altamente educativo. La mala educación se contagia y el afán por decir insensateces e incluso mentecateces también. La primera pregunta que surge al saber de ella es: ¿en dónde habrá recibido educación? Pero luego surge la realidad del dinero que le pagan por eso y entonces se entiende ya que está montando un espectáculo, o todos los que haga falta, para que le sigan pagando. Que la inviten a ella, y a otros que son como ella, a esa televisión sólo se explica en el que supuesto de que al mando esté alguien cuyas capacidades cognitivas no sean las ideales.
Pero no sólo está la TV3 haciendo campaña a favor del mal, con el fin de hundir a Cataluña en la miseria, también Otegui colabora en el asunto. Y con eso está dicho todo.

viernes, 23 de marzo de 2018

Torrent se la va jugando

Trata de demostrar Torrent que desafía al Estado, pero lo hace a lo tonto, es decir, sin pasar de la fase simulacro. Se conoce que lo hace para contentar a un público determinado, que a estas alturas ya se conforma con poco.
O para demostrar que a gilipollas no lo gana nadie, pero en este terreno lo tiene difícil, porque hay mucha competencia. Irena Montera, pongamos por caso, ataca al Rey sin ton ni son, también para que le aplauda la galería de impresentables incapaces de distinguir un burro de una silla. Otro que tal puede ser Echenique, que dice no sé qué de la minga, no quiero ni pensarlo. De esos se llega en un pispas a su admirado Pablo Iglesias que está en contra de la cadena, pero es porque prefiere la guillotina, pero esto ya se lo calla, porque el cálculo electoral lleva a decir otra cosa, aunque lo fundamental es oponerse al PP. Los podemitas necesitan señalar un enemigo para justificar el odio, que es el motor con el que consiguen votos. Del odio a la guillotina, un paso.
La competencia es grande y ese Torrent (de estupideces cabría pensar) no se da cuenta, o no se quiere dar, porque vive de eso, porque el día que se entere tendrá que dejar su chollo y ponerse a trabajar para vivir, lo que no parece que le seduzca mucho, de que la bufonada se ha terminado. Un bufón que sí tiene gracia, Boadella, ha ido a decírselo o otro bufón que no tiene ninguna gracia, Puigdemont, al mismísimo Waterloo, pero es difícil que este último se dé por enterado, porque mientras pueda no dejará de hacer daño.
Otra señal de que la bufonada se ha acabado es la fuga de Rovira, con la cual el nivel moral de Cataluña ha subido un poco, como también ocurrió con las anteriores fugas.