domingo, 8 de octubre de 2023

5000 proyectiles contra Israel

 

El Felón ha condenado el ataque en un comunicado institucional. Se lo habrá escrito algún subordinado. A él le da lo mismo, lo único que le interesa es ser el presidente de España, y no del mundo, porque no existe ese cargo.

No digo yo que a él le importa un bledo el ataque terrorista, lo demuestra él. Sus socios de gobierno han lanzado mensajes infames, que dejan en mal lugar a España y no dice ni hace nada. También el prófugo colgó boca abajo una foto del Rey y el Felón sigue negociando con él. El apelativo mamarracho le cuadra muy bien al Felón.

Con respecto al atentado, hay algunos detalles significativos. Los servicios secretos israelíes no se enteraron, lo que hace sospechar que todo se preparó en otro lugar distante del campo de operaciones. Quienes han organizado el ataque se sirven de palestinos a los que previamente se ha lavado el cerebro, para desestabilizar a las democracias del mundo.

El escudo antimisiles de Israel no estaba, quizá porque está siendo utilizado en otra parte, concretamente en la invasión de Rusia a Ucrania. Los cerebros del ataque sabían esto. ¿Qué pretenden? ¿Desestabilizar solo a Israel?

Todos los terminales mediáticos del mundo, incluidos los de España, afines a los terroristas se han aprestado a sembrar la confusión sobre las causas y los motivos. Lo mismo que ocurre con la invasión rusa.

La cuestión es clara en ambos casos. Fue Rusia la que invadió y todos los pretextos de los que se sirve para justificarlo son infames. Y es el grupo terrorista Hamás el que ha perpetrado el brutal ataque, que no tiene defensa posible. No obstante, ministros del gobierno del Felón mamarracho se han posicionado a favor de los terroristas.

Espero que la opinión pública española se dé cuenta de la barbaridad y comprenda que esta actitud no es nada buena para los españoles. Porque tener unos ministros y un presidente tan sanguinarios no es bueno para nadie, y porque en el plano internacional tiene la consecuencia de que nadie se fíe de España.

Esos libros míos

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