Pitan al Felón y le gritan ¡Que te vote Chapote!, y periodistas de los panfletos subvencionados no están conformes con el eslogan, porque dicen que es el presidente ‘legítimo’, y al añadir esta apostilla demuestran que no creen que lo sea, porque si lo creyeran se habrían limitado a decir ‘el presidente’ o ‘el presidente en funciones’. En realidad lo es porque lo apoyan terroristas, golpistas y gente de mal vivir.
El propio Felón reclama respeto a las instituciones, pero el delincuente fugado cuyo voto aspira a conseguir colgó una foto del Rey boca abajo, sin que el hecho haya tenido consecuencias. Él mismo le falta al respeto al Rey cada vez que tiene ocasión, demostrando que es muy malcriado.
La vicepresidenta visitó al prófugo de Waterloo, lo cual es una burla a los españoles y a las instituciones y eso tampoco ha tenido consecuencias.
Colocar en la presidencia del Congreso a Armengol es una falta absoluta de respeto a las instituciones, y ella misma ha corroborado esto desempeñando el cargo vestida como le da la gana, y también impidiendo que el Parlamento haga una declaración institucional en contra de Hamás.
Hay ministros y ministras de su gobierno posicionándose a favor de los terroristas y proclamando que el 12 de Octubre se conmemora un genocidio.
El Felón no está bien de la cabeza, pero hay un ganado lanar que lo apoya y dinero para subvencionar medios de comunicación.
Enrique Gimbernat dice que la Constitución no permite la amnistía,
se declara amigo de Pumpido, del que dice que es un sabio y que hará lo correcto, pero a continuación añade que si se aprueba se podrá recurrir por varías vías, que la tramitación de los recursos durará dos o tres años, con lo cual parece que esté avisando a Puigdemont para que no le dé el voto al Felón, porque no le serviría de mucho, y así que su amigo Pumpido no tenga que hacer una barbaridad.
Che, qué cosas pasan.
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