Tras la heroica acción de Israel mediante la que ha rescatado a cuatro rehenes, a costa de perder a un militar muy valioso en la operación, el repugnante Borrell emitió el siguiente mensaje en equis: «Josep Borrell Fontelles @JosepBorrellF
Parece ser que como represalia, Hamás ha asesinado a tres rehenes de entre los que siguen en su poder.
Hay algo insano en Borrell, como lo demuestra con ese mensaje, y ensucia tanto el nombre de España como el gobierno que lo eligió para el cargo y que ya no seguiría si la Constitución hubiera dotado de mecanismos para defenderse a los malos gobernantes a los ciudadanos. Como los que hay en Portugal, por ejemplo.
La situación de la zona la ha explicado perfectamente Alejo Vidal-Quadras, que a su vez se apoya en un discurso de Florentino Portero. Estoy de acuerdo con A. V-Q., salvo en el punto en que defiende al Islam. Los buenos musulmanes chiitas lo son a pesar de la religión.
Aparte de esto, el diagnóstico es claro. Los líderes iraníes no aceptan más solución que el Califato, en el que uno de ellos ha de ejercer la máxima autoridad y tener dominio sobre todos los residentes en la zona, provocando la desaparición de todos los gobiernos, musulmanes o no.
Por tanto, no hay más solución que la victoria absoluta sobre todos los terroristas de la zona. El mundo occidental debería apoyar sin fisuras a Israel, por interés propio, porque es el dique de contención frente a la amenaza iraní.
Pero las democracias no terminan de darse cuenta y además hay mequetrefes como Sánchez y Borrell, y seguramente el peor es el segundo, por ser su nivel intelectual muy superior al del otro.
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