viernes, 8 de junio de 2018

Catalufos

Le ha mandado Joaquín Torra dos libros a Alfonso Guerra sobre campos nazis, como si los catalanes a los que se refieren esos libros hubieran tenido que ser necesariamente catalufos.
Por otro lado, este Torra se arroga indebidamente la representación de todos los catalanes. Es el presidente de la Comunidad Autónoma, eso sí, pero él mismo, puesto que no reconoce a los catalanes, o sea, a los demócratas, y tan sólo atiende a los catalufos deja claro que sólo representa a estos últimos.
¿Por qué le ha mandado esos libros a Guerra? Pues porque ha dicho que Torra habla exactamente igual que un nazi. No sólo le ha mandado los libros, sino que se ha querellado con él.
Puesto que desconozco los procedimientos judiciales, ignoro si el juez querrá comparar los artículos o discursos de Torra con los de los nazis y lo que puede ocurrir en el caso de que observe que sí que son iguales, porque el nacionalismo aún no está prohibido en ningún país, pero el nazismo sí.
Los catalufos se pasan la vida ofendiendo a los demás, pero luego tienen la piel muy fina y en cuanto se les responde montan un pollo.
Han tenido que suspender un acto sobre Cervantes que se iba a celebrar en la Universidad de Barcelona, porque a los catalufos no les da la gana. Hay como dos millones de catalufos que no dejan vivir en paz a los que no piensan como ellos y les lanzan insultos que aunque dan risa no dejan de ser insultos y tampoco dejan de causar molestias. Los que han impedido, mediante métodos de la edad de piedra, el acto sobre Cervantes, llamaban fascistas a los que pretendían llevarlo a cabo. Si eso no da risa...Es como si los nazis hubieran llamado nazis a los que llevaban al crematorio.
Las burradas que dicen los catalufos también mueven a risa: el castellano es una lengua de imposición y colonización. ¿A dónde creen que van?

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