viernes, 17 de octubre de 2014

Gorka Maneiro molesta al PNV

Los partidos nacionalistas no tienen como finalidad procurar el bienestar de los ciudadanos, sino que defienden supuestos derechos históricos de determinadas zonas geográficas. No miran al porvenir, sino que se aferran al pasado.
La consecuencia de todo ello es que quienes realmente se benefician de esta política son quienes quienes tienen el poder real en esas zonas geográficas. Y esos actúan como auténticos oligarcas. Consiguen que la gente les vote masivamente recurriendo a una serie de enredos, tergiversaciones e inventos, sustentados en última instancia por el odio, tan común en aquellos lugares en los que abunda la frustración a causa precisamente de que los oligarcas lo tienen todo bajo control. Estos pájaros de cuenta consiguen desviar el odio hacia otros. Hay un señor muy hábil con el peine, que probablemente mientras enreda su pelambrera ha aprendido tambiéna enredar en otros campos.
Es obvio también que sin los partidos nacionalistas no habría sido posible que las bandas terroristas que han surgido en España perduraran tanto. Los nacionalistas, especialmente hábiles para inventar agravios, con los que incitan al odio, proporcionan 'argumentos' a los terroristas y sobre todo a quienes les amparan y protegen, algunos de estos últimos pertenecientes a la Iglesia Católica Romana y Apostólica. El Papa actúa con ellos con suma prudencia, por si acaso.
Gorka Maneiro pertenece a UPyD, el partido que con más firmeza ataca al terrorismo, la corrupción y la estupidez.
Gorka Maneiro había protestado por los escándalos de Epsilon e Hiriko, que tan onerosos han resultado para el contribuyente. Una cantidad inimaginable de millones de euros en ayudas públicas. Gorka Maneiro con esta iniciativa ha procurado por la gente que trabaja duro para pagar los impuestos.
Y el PNV se ha cabreado, porque los partidos nacionalistas no consienten que nadie les lleve la contraria. Le han llamado termita carroñera y alumno aventajado de Goebbels. Cualquier democráta que sea insultado por un nacionalista debería dar saltos de alegría.

No hay comentarios: