sábado, 8 de abril de 2017

El PNV no se irá de rositas

Nadie ha intentado rebatirme nunca, entre otras cosas porque es imposible hacerlo, y tampoco me voy a cansar jamás de decirlo, por si alguno no lo había pensado todavía a pesar de la obviedad.
Sin el PNV no hubiera sido posible la existencia de ETA. El PNV ha proporcionado coartadas morales a los terroristas y a sus cómplices activos y pasivos. Ambos, ETA y el PNV tienen su origen en las barbaridades vertidas por Sabino Arana, un tipo torpe, ruin y fanático. Sin el PNV, ETA habría durado poco más de unas horas, en el caso de que hubiera surgido.
El daño que ha hecho ETA a la sociedad española en general, cuya política ha condicionado, y lo sigue haciendo, desde que surgió, y a la vasca en particular, perdurará durante mucho tiempo. Por un lado está el daño económico, que es cuantioso, y por otro está el daño moral, que tiene dos vertientes: el de quienes han tenido que vivir con el miedo en el cuerpo y además se han visto excluidos, y el de quienes han profundizado en su vileza.
Si los dirigentes del PNV hubieran tenido algún interés por la ética, o por la moral, o simplemente hubieran sentido amor por las gentes de su tierra, se habrían percatado de que la existencia de su partido facilitaba la de la banda terrorista y únicamente por eso ya merecía la pena disolver el partido. Pero no se le pueden pedir peras al olmo y en realidad, su respuesta fue la de varear el árbol y recoger las nueces.
El PNV no se irá de rositas, ni ETA tampoco, por más que lo intenten y se procuren la ayuda de ciertos mequetrefes, porque todo está documentado y los historiadores dirán que han hecho mucho por destruir al pueblo vasco. Aunque también puede ser cierto que los mejores españoles de hoy en día sean vascos y tengan el mismo espíritu que Blas de Lezo.

No hay comentarios: