jueves, 8 de febrero de 2018

Anna Gabriel, en Venezuela

Luego dirán que la Justicia española no cumple los tiempos y los procedimientos. Si hubiera esperado un día, Puigdemont no se podría haber fugado, porque cuando lo hizo todavía no había una orden de captura sobre él.
No obstante, tuvo que montar el numerito. Si Dencás se fugó por las alcantarillas él no iba a ser menos, así que se metió en el maletero de un coche. A ridículo no hay quien gane a Puigdemont.
¿Cabe decir que esta Gabriel se ha fugado a Venezuela? Por supuesto que no, ha ido a enseñar a las venezolanas a olerse los sobacos, a decir sandeces, pero sobre todo a aprender los métodos ‘democráticos’ de Maduro. Si las fuerzas del orden del dictador venezolano aplastan una manifestación mediante los métodos más expeditivos, a consecuencia de los cuales incluso hay varios muertos, a ella le parecerá bien, porque la ‘democracia’ tiene que defenderse de sus enemigos. Maduro no quería que muriera nadie, pero no ha habido más remedio que usar la fuerza ‘para asegurar el bienestar de todos los venezolanos y todas las venezolanas, que estaba siendo amenazado por los fascistas’.
A Anna Gabriel tampoco le preocupará demasiado que en Venezuela se esté muriendo la gente de hambre, porque la culpa es del imperialismo de los Estados Unidos y del capitalismo, que no dejan desarrollarse libremente al país, ni que las medidas que implanta Maduro tengan éxito. Pero esos ‘cerdos capitalistas no podrán impedir que Maduro prosiga con la alta misión que le tiene encomendada el comunismo’. Por supuesto que Anna Gabriel no va a pasar hambre en Venezuela, ella no ha ido allí para eso, así que el gobierno venezolano le pondrá mesa y mantel.
Lo que no se sabe es si se va a quedar en Venezuela, como sin duda es su deseo, pero eso a lo mejor no depende de ella, sino de la utilidad que Maduro vea a su estancia en el país.

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