sábado, 10 de febrero de 2018

Le han hecho publicidad a El Pozo

Al menos en lo que a mí respecta la publicidad ha surtido efecto. Me he enterado de los (malos) políticos de Compromís andan atacando a Consum, porque esta empresa no obedece sus órdenes y lo rotula todo en catalán.
Pues ahí he ido yo, a Consum. Estoy harto ya de que se nos intenten imponer dialectos que no tenemos ningún interés en aprender, más que nada porque el día tiene 24 horas y cada uno tiene derecho a aprender lo que le interesa.
Dentro de Consum he ido a buscar El Pozo y he comprado varios de sus productos, porque un sinvergüenza ha tratado de desacreditar a esta empresa, vertiendo insidias sobre ella. Espero que esta iniciativa haya tenido el efecto contrario al deseado por el instigador y las gentes se lancen en masa a comprar salchichones, chorizos y jamones El Pozo, porque es una empresa que lleva muchos años dando trabajo a un buen número de empleados y el Estado, que somos todos, tiene sus propios servicios de inspección, para proteger la salud de los consumidores. Hay que hacerles caso a ellos y no a esos sinvergüenzas interesados, que seguramente lo que pretenden es beneficiar a algún competidor.
Jamás he visto un programa de esta persona, ni tengo intención de hacerlo, porque no me gusta que me manipulen ni que me tomen el pelo.
Y es bueno recordar que nunca me ha sentado mal ninguna cosa que lleve la marca de El Pozo. Por otro lado, además de los servicios estatales de inspección, está la responsabilidad de las empresas que venden sus productos, en este caso el denostado por Compromís, Consum, que si tiene El Pozo en sus estanterías es porque confía en esa marca.
¿Cómo es posible que un mamarracho pretenda tomar el pelo a tanta gente? ¿Se cree que los demás somos tontos?

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