lunes, 25 de mayo de 2015

Rita se va

Hoy he pasado por delante del ayuntamiento de Valencia y el pensamiento se me ha ido hacia Rita Barberá, cuyo ciclo parece terminado.
No estoy contento, contra lo que pueda parecer. Rita Barberá me parece una mala alcaldesa, pero la vida enseña que todo lo malo se puede empeorar. En El gatopardo hay una pista sobre la cuestión: "Nosotros somos leopardos y leones, quienes tomarán nuestro lugar serán hienas y chacales. Pero los leones, leopardos y ovejas seguiremos considerándonos como la sal de la tierra."
Hay una pista, porque no veo a los leopardos ni a los leones por ninguna parte. Tampoco a las leonas. En cambio creo que abundan las hienas, los chacales y las ovejas.
Rita, o el ayuntamiento que ella presidía, tuvo la intención de sustituir el muro del Jardín de Monforte por una verja, pretensión contra la que se movilizaron todos los espíritus sensibles de la ciudad, y a la masa de votantes no le importó tamaña insensatez. Lo del 'caloret', en cambio, sí parece que le ha pasado factura, aunque tampoco es seguro ese extremo. También hay que tener en cuenta el cansancio de los votantes hacia sus bruscos modales y su modo de proteger a sus polluelos.
Quienes se asoman a este blog saben que yo no he votado a los catalanistas y que no me hace ninguna ilusión ver ciertos trapos que a modo de banderas ondean estos días por aquí. En su artículo titulado 'Lecturas en un mayo ardiente', de Las Provincias, Rafa Marí escribió lo siguiente: 'Sus opiniones pueden sonar (a veces) a discutibles y tercas'. Pues eso, yo voté a UPyD, el partido que más ha hecho por la democracia y por la dignidad de los ciudadanos. Hay cosas que a los votantes les interesan más y otras a las que no hacen tanto caso.
Yo creo que los votantes eligen a los que más se les parecen.
Fernando Savater, Fernando Iwasaki, Rosa Díez, Maite Pagazaurtundúa, y tantos otros: Muchas gracias por vuestro esfuerzo.

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