viernes, 21 de junio de 2013

Blesa quiere un juez imparcial

O sea, que ha salido de la cárcel a petición de la Fiscalía, cosa que no debe de ser muy frecuente, y aun se queja. Quiero un juez imparcial, ha dicho.
Eso queremos todos, que los jueces sean imparciales. E independientes. Conviene obviar que los oligarcas suelen hablar con eufemismos y que la palabra 'imparcial' puede tener distintos significados, según quien la use. En lugar de poner el foco en la palabra imparcial, se puede poner en 'quiero'.
Blesa quiere. Quienes compraron preferentes y acciones de Bankia también quieren. Los empleados de CajaMadrid que han ido a la calle por la ruina de la Entidad también quieren. Los ciudadanos que se han quedado sin una Caja de Ahorros que, al menos teóricamente, cumplía una función social, también quieren. Y los afectados por la pérdida del mecenazgo que llevaba a cabo CajaMadrid también quieren.
Blesa tiene la esperanza de que le absuelvan de todo, y de que no toquen su capital. O de que le condenen y luego le concedan el indulto, como ocurrió con otro banquero. ¿Por qué iba ser menos Blesa? O de que tenga que ir a la cárcel, pero sólo a dormir. O de que lo condenen, pero que salga pronto de la cárcel por buena conducta. Tiene esperanzas Blesa, y además puede decir: 'que me quiten lo bailao'. Lo que disfrutan algunos sintiéndose poderosos es mucho.
Los contribuyentes que han visto que el dinero de sus impuestos se le ha dado a Bankia no tienen ninguna esperanza con respecto a ese dinero. Los ciudadanos que invirtieron sus ahorros en las preferentes pueden haber desarrollado alergia a la palabra esperanza. Los empleados de CajaMadrid que vendieron las preferentes han de enfrentarse cada día con quienes las compraron. Quienes compraron acciones de Bankia no dan crédito a lo que ven, después de tanta publicidad.

No hay comentarios: