martes, 31 de diciembre de 2013

Se va 2013, llega 2014

Anda la gente despidiendo con alegría al año 2013 y esperando con ilusión la llegada del 2014. Esta ilusión se funda en algo esotérico, en que surja algo que todavía no está a la vista.
El optimismo es necesario para vivir y si no hay motivos para sentirlo, se inventan. Pero la verdadera base del optimismo se encuentra en la propia disposición de hacer lo posible para que las cosas salgan bien. «Los hados podrán quitarnos la ventura, pero el esfuerzo y el ánimo es imposible», esta debería ser la máxima que nos permitiera encarar el año que ya llega de forma razonable.
Objetivamente, el asunto se presenta feo, salvo para Botín y unos pocos más. Rajoy sigue en el gobierno y ya se ve que dicta leyes de forma unilateral, que son contestadas incluso dentro de su propio partido. Rubalcaba sigue como líder de la oposición y alguien debería hacerle leer la entrevista de Ovejero, http://friedapple.net/OVEJERO-Entrevista_topo.nacionalismo2.pdf, porque el hombre no se entera. Apañados estamos así. En una de las Comunidades Autónomas persisten esos dos, Mas y Junqueras, en esa locura suya que ni Rajoy ni Rubalcaba se atreven a enfrentar. En otra de las Comunidades Autónomas los asesinos y sus amigos insultan a las víctimas. En la Comunidad Valenciana, por parte de su gobierno y de la oposición, el asunto se presenta negro negrísimo. Etc.
En lo que respecta a las gentes de toda España, que es en donde se sustenta todo, persisten el fanatismo, la intolerancia, el sectarismo y hasta el fetichismo, porque a los fetiches, ni tocarlos. A mí se me ocurrió criticar a Serrat, ese dechado de virtudes, según algunos...
«Se dice que hay democracia en un lugar cuando alguien que piense lo contrario que la mayoría puede pasear tranquilamente por sus calles».
Yo deseo para este año 2014 que todos los españoles tratemos de profundizar en nuestras convicciones democráticas. Que nos demos cuenta de que el Otro tiene derecho a pensar distinto.

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