lunes, 12 de mayo de 2014

Discrepancias entre Rubalcaba y F. González

Quizá se deban a que Felipe González lleva mucho tiempo al margen de la política y desde fuera las cosas se ven mejor.
Por contra, Rubalcaba está dentro y, por tanto, están en juego sus aspiraciones personales y las de su equipo, en el que está Patxi López. Este último está explicando estos días que hay dos formas de entender la dignidad humana (sic). El modo que tiene Patxi López de entender la dignidad ya se sabe cuál es. Cuando  Pilar Ruiz Albisu le escribió una carta, dio la callada por respuesta. Cuando Maite Pagazaurtundúa, Rosa Díez, Fernando Savater y otras tres personas le escribieron una carta, dio la callada por respuesta. ¿Su modo de entender la dignidad consiste en reírse de las personas dignas?
La cuestión es que Felipe González ya se ha dado cuenta de que vivimos una situación de emergencia, por muchos motivos. La cuestión es que como ya no está en la política y no tiene nada que ver con los casos de corrupción en que están inmersos los partidos puede cultivar su imagen de estadista. Cuando gobernaba era más difícil, y ese es el caso de Rubalcaba, que no es que gobierne, pero en su partido tiene mando en plaza. Además, ha estado en los gobiernos de F. González y de Zapatero, y no puede desdecirse de sus actuaciones en ambos casos. Lo ideal para él sería irse ya de la política, pues todo apunta a que tiene ofertas de varias empresas del Ibex, pero a la vista de los que aspiran a sucederle en el partido, no se hace a la idea. Si estuviera Borrell entre ellos, quizá, no se lo pensaría.
Desde 2004, se echa en falta la coalición de los dos principales partidos para salvar la grave situación que vivimos, agravada considerablemente por la actitud de los nacionalistas. Los perjudicados son los más vulnerables. De modo que debería ser el PSOE el que pidiera la coalición, pensando en quienes más sufren la situación.

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