miércoles, 3 de noviembre de 2010

Eguiguren y Otegi

Jesús Eguiguren, presidente del PSE, ha sido citado a declarar como testigo de la defensa de Arnaldo Otegi. Conozco a mucha gente que se avergonzaría de tener amistad con Otegi, o sea, por nada del mundo tendría ningún tipo de relación con ese sujeto, salvo que fuera policía o juez.
Yo mismo no me atrevería a salir a la calle, si se diera el caso, porque podría cruzarme con alguna víctima de ETA, en cuyo caso tendría dos opciones: bajar la vista al suelo o convertirme en un desalmado y mirarla con descaro. Otegi nunca ha condenado a ETA, si lo hiciera lo soltarían de inmediato, dadas las ganas que demuestran tener de ello. Otegi, todo lo más que ha dicho es que no es tiempo de bombas y cosas similares.
Ser amigo de Otegi es lo mismo que ofender a las víctimas. Yo no podría soportar que una víctima de ETA tuviera motivos para despreciarme. Eduardo Madina, víctima de ETA y socialista, debe de estar que trina. Tiempo atrás, dio muestra de su habilidad literaria explicando su odio a Aznar. Cabe suponer que si odia tanto al anterior presidente del gobierno, los etarras, que le han hecho tanto mal, y a los amigos de los etarras le deben hacer vomitar de asco. Quizá Eduardo Madina no pueda explicar en su blog lo que piensa de Eguiguren, porque ambos militan en el mismo partido y los dos tienen cargos importantes.
Jesús Eguiguren, no se ha privado de alabar a Otegi, del que ha dicho que es amante de la paz y que sería mejor que estuviera fuera. Es presidente del PSE y dadas las estructuras actuales de los partidos cabe pensar que ha obtenido el cargo mediante las maniobras habituales. Si hubiera accedido a ese cargo siendo el partido absolutamente democrático, sería preocupante.
'Tauroética'
'Fábulas contadas a los niños'
'Espejismos'
'Hablar sin palabras'
'Los tiburones han muerto'
'El Cid contado a los niños'
'Ninfas'

1 comentario:

María Jesús dijo...

La cabeza, o bien alta o bien baja.Nada de estar entremedias. Lo mismo que la dignidad del dueño de los hombros que la sujetan.
Una de las cosas útiles que he ido aprendiendo con el paso del tiempo es que la cabeza se acaba colocando solita encima de los hombros de las personas,así, sin esfuerzo aparente.