Los distintos candidatos a la presidencia de EE.UU. proponen hacer cambios en el sistema sanitario de su país. Afortunadamente, las cosas son así. Va siendo hora de que allí piensen en algo más humanitario que lo que tienen en la actualidad. Deberían entender que el derecho a la salud es primordial y que cuando alguien va a un centro médico, por enfermedad propia o para llevar a algún familiar, en lo único que no ha de pensar es en el dinero. Sin embargo, uno de los candidatos ha tachado la propuesta de otro de estar socializada al estilo europeo. ¿Qué se habrá creído ese candidato? Precisamente, uno de los grandes logros europeos es el estado del bienestar, que ojalá no perdamos por culpa de los nacionalistas, que no paran de distraernos, haciéndonos olvidar el objetivo principal. Es cierto, no obstante, que la sanidad europea podría y debería funcionar mejor, pero hay que diferenciar entre idea y desarrollo. Tomando la idea, los estadounidenses se ayudarán; desarrollándola bien, nos ayudarán, porque demostrarán que es posible y nos obligarán a seguir su camino. Los motivos por los que no termina de funcionar tan eficientemente como sería deseable pueden ser varios. Por ejemplo, quizá lo que ocurra en España sea que nuestros políticos, ésos que nos prometen el oro y el moro cuando es la hora de votar, al salir elegidos procuran colocar bien a sus hijos, hermanos, padres, abuelos, primos hermanos, primos segundos, cuñados, suegros, amigos, etc., sobre todo si los tienen por ineptos. Quizá buena parte de esa parafernalia familiar y amistosa vaya a parar a la seguridad social y de ahí que ésta vaya con el pie cambiado y siempre detecte tarde los problemas y no acierte con las soluciones. Otro problema de la Seguridad Social es que jamás debieron transferirse sus competencias a las Comunidades Autónomas, puesto que es muy difícil hacer un reparto justo de los fondos, sobre todo en estos tiempos en los que se viaja tanto. Una Comunidad no es menos autónoma por no controlar su Seguridad Social. De modo que los estadounidenses pueden tomar la idea y rechazar las equivocaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario