martes, 4 de enero de 2011

Los derroches de Camps

El título debería haber sido “Los derroches de la Generalidad”, pero ya se sabe que en la política de hoy hay uno que manda y el resto tan solo obedece. ¨La cuestión es que últimamente los tranvías de Valencia van cargados de una publicidad mediante la cual se pretende informar a los ciudadanos de que la Generalidad gasta cada día x dinero en tal asunto, otra cantidad en este otro, etc.
No se entiende cuál puede ser el motivo de que se haga esta publicidad. ¿Insinúa el gobierno valenciano de que en el improbable caso de que gobernaran los socialistas no atenderían esas necesidades básicas? (El gobierno es tan improbable por estas tierras dado que debido a la deriva que tomaron los socialistas valencianos en su día y que mantienen en la actualidad, si el PP presentara una escoba como cabeza de lista ganaría igual las elecciones).
Lo que no cuenta el gobierno de Camps es el descontrol en el Palau de les Arts. El informe del Síndico de Cuentas, Rafael Vicente Queralt, es sumamente preocupante. ¿Por qué el gobierno de Camps no explica a que se debe? 581000 euros son muchos euros. La televisión valenciana, como todas las televisiones autonómicas, ha de acabar cerrando por falta de espectadores. Pero mientras llega ese día soñado, el derroche no cesa. Cuando se le pregunta al gobierno valenciano por el chorro de dinero que supone esta televisión, responde necedades. Las colas que hay en Cáritas ponen los cabellos de punta, descorazona ver tanta necesidad. Mientras tanto, el dinero se va en grandilocuencias, en intentos por emular a Ramsés II, o más bien a toda la dinastía.
En los tranvías nos ponen la información de los gastos necesarios, pero se omite la de los que ponen en peligro. Que son muchos.

'Mal consentido'
'Factor Emocional'
'Leyendas de Bécquer contadas a los niños'
'Guía de supervivencia de Amelia frente a matones'
'El Quijote contado a los niños'
'La aventura del cálculo'
'Chitón. Historia de una infancia'
'Diario de Amelia'

1 comentario:

Helio dijo...

Por lo que comentas, del derroche se libran muy pocos.
No entiendo que no exista ningun politico que diga alto y claro que las TV autonomicas deben desaparecer.
Saludos Vicente.