martes, 22 de septiembre de 2009

Millet ha decepcionado

Aparentemente, toda Cataluña está rasgándose las vestiduras por la actuación de Félix Millet. Lo que escuece a muchos no es que haya defraudado las arcas públicas, sino que lo haya hecho uno de los “suyos”. Un catalanista de pata negra. Ahora bien, nadie ha explicado todavía los motivos por los que se piensa que un catalanista de pata negra ha de ser más honrado que los demás. Tampoco lo podrían explicar, si lo pretendieran.
Es más, dada su estancia en el poder, en Cataluña, lo probable es que entre los catalanistas de pata negra haya más corrupción que en el resto. Pero una cosa es lo probable y otra lo comprobado, porque a la vista de que todo va manga por hombro, sin control de ninguna clase, no se vislumbra el modo de ver lo que ocurre. Otra cosa que llama la atención es que todo el mundo está indignado con Millet, todos dicen que eran muchos los controles que no funcionaron, y nadie está indignado con esos controles, no han salido a la luz los nombres de los responsables de esos controles, nadie les ha pedido que dimitan y ellos tampoco han dicho nada en este sentido.
Es decir, la cosa pasa de castaño oscuro, pero se conoce que es mejor no removerla, no vaya a ser que aparezcan más personas como Millet; si se diera el caso, además, de que se demostrara alguna irregularidad en alguien dependiente de ERC, peligraría el Tripartito. Pero la prodigalidad con la que gasta el dinero Carod ya es moralmente corrupta, aunque pueda ser legal, aunque nadie se atreva a ponerle coto y a explicarle que eso es un disparate, además de una ofensa para todas aquellas personas que están en situación precaria. El sentido de la responsabilidad brilla, una y otra vez, por su ausencia.

2 comentarios:

Luisma dijo...

¿Catalanista el señor Millet? Le veo mal informado a usted. ¿Sabe usted que el señor Millet es patrono de la FAES? ¿Cómo va a ser catalanista? Catalán, de la burguesía catalana, sí que es.

Anónimo dijo...

http://www.elmundo.es/opinion/columnas/arcadi-espada/2009/10/19589094.html

Espero sinceramente que el párrafo te haya emocionado. No sólo es una muestra más precisa que el carbono 14 de un instante de la Creación Colectiva. Te habrás fijado en cómo detalla, con una confianza enternecedora, la confusión (¡la colusión!) entre el Mí, la Casa, el Nosotros y el Yo. En el libro de Manent, que es tan útil como todos los suyos, encontrarás desarrollado ese asunto y muchos otros. En especial la descripción de los escorzos que tuvo que hacer un hombre con un pie en el franquismo y otro en el catalanismo.