sábado, 31 de julio de 2010

Los dictadores no leen

La referencia a los dictadores es metafórica, no se trata nada más de aquellos que tiranizan un país, como sería el caso de Fidel Castro, sino que tiene que ver con quienes no toleran que se discutan sus órdenes o se pongan en cuestión.
No es necesario ir muy lejos para encontrar esta clase de gente, abunda en España. Américo Castro hacía notar que las mujeres de París no querían criadas españolas, por su carácter imperativo. En la actualidad, no han mejorado mucho las cosas, la tan deseada democracia no es tal. En muchos países de América del Sur existe la división de poderes, mientras que en España el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial dependen de las mismas personas. E incluso el llamado cuarto poder. Quizá por esto, o ayudado por esto, el espíritu caciquil sigue imperando, lo que motiva que dirigentes políticos capaces de hacer grandes cosas también cometan errores descomunales, porque nadie se atreve a llamarles la atención.
Pero no sólo ocurre esto en la política, en la empresa privada viene a ser igual, si un componente de un Consejo de Administració0n se atreve a poner en duda una decisión del presidente puede dejar de ser Consejero a la primera ocasión que se presente o, si no se llega a esos extremos, ser considerado en adelante como una persona incómoda. Sirva como ejemplo que alguna vez se ha ido al traste una empresa, se ha destituido al presidente por su mala gestión y el Vicepresidente ha tomado su puesto y los demás Consejeros han seguido en los suyos, como si no tuvieran nada que ver con lo anterior.
La cuestión es que los dictadores no leen puesto que no les interesa afinar su criterio, para tomar luego decisiones más fundadas, sino que lo que les importa es salirse con la suya en cada momento, para lo cual les basta con potenciar su instinto, ese mismo que les ha servido para auparse. ¿De qué le serviría a Zapatero leer El fundamentalismo democrático?

'Red de mentiras'
'La esposa del Rey de las Curvas'
'Los Borgia'
'La ciudad desplazada'
'Tus colores son los míos'
'El filósofo entre pañales'
'Dichos, comparaciones y frases populares'
'Homero, Ilíada'

1 comentario:

SolAR dijo...

Conozco algunos así, ni leen, ni prestan escucha a los que más saben. Necesitan seguir en sus convencionalismos. Están cagados de miedo.
Sé de uno concretamente que cree que la culpa de la crisis la tienen las mujeres, por salir de sus casas a trabajar. Pero, no se da cuenta que él ha tenido a su mujer, desde que se casaron hecha una exclava, literalmente.
En fin, de estos abundan mucho, y en las zonas rurales más.

Saludos