Cuando Manuel Pimentel se hizo cargo del asunto, todo el mundo supo de inmediato que le iba a dar una solución adecuada. Del mismo modo, cuando fue el ministro de Fomento quien quiso resolver la cuestión, no fue necesario recurrir a la clarividencia para saber que iban a abundar las marrullerías y los golpes bajos.
Manuel Pimentel fue un ministro en el gobierno de Aznar que cuando no estuvo conforme con éste dimitió, para volver a su actividad privada. Esta actitud no es muy frecuente en la política española, creo que es el único caso en que ha ocurrido; puede haber otros parecidos, como el de Solbes, pero en realidad no tienen nada que ver, porque éste sí que colaboró con el gobierno de Zapatero en negar la crisis, por motivos electorales, cuando ya había estallado la burbuja inmobiliaria. El hecho de que el de Pimentel sea el único caso prueba que el sistema político español está mal diseñado.
Pepiño quiere que le llamen Don José, Don José Blanco, para ser más exactos, pero él suelta por su boquita de ministro eso de frikis y anarcoides, pero no dedica esos epítetos a todos los que han criticado la última ocurrencia de su gobierno, más empeñado en entretener al personal que en solucionar problemas, sino sólo a unos cuantos. Se sabe también que Pepiño nunca dimitirá por estar disconforme con Zapatero. Haga lo que haga éste, Pepiño siempre está de acuerdo.
Afortunadamente, lo que tuerce uno lo ha podido enderezar el otro. ¿No hubiera sido mejor, como apunta María José Pou, haber comenzado por ahí? Si desde el primer momento se hubiera contado con Manuel Pimentel para solucionar el problema, nos hubiéramos ahorrado muchas molestias y dinero y nos hubiéramos avergonzado menos por la incapacidad de nuestros gobernantes.
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2 comentarios:
Hola, este comentario es para avisarte que eres nuestro blog destacado, y que estarás una semana en la portada de Punto Hispano a partir de este día.
El tema de los controladores, con el estado de alarma incluido, ha dado mucho juego, sobre todo a la prensa.
No creo que fuera dificil la negociación, primero les amagan con 8 o 10 años de carcel y ya les dejan mas suaves que un guante.
Saludos.
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