Está
todo el mundo que trina ante los graves e improcedentes recortes con
que nos ha castigado el gobierno de Rajoy, y hasta Rubalcaba dice,
hipócritamente, que castiga a los pobres en beneficio de los ricos.
¿Es que las cosas no se hacían del mismo modo con el gobierno
socialista? ¿Es que el gobierno de Zapatero hizo algo para frenar el
fraude fiscal de los ricos?
Los
ciudadanos españoles no tienen más cauce para expresar su
descontento que la calle. Por eso los socialistas tratan de hacer
suya la calle, para que las protestas reviertan en su beneficio.
Aquí, el que no corre vuela.
Lo
correcto sería establecer cauces para que el pueblo pudiera hacer
valer sus deseos. Estableciendo una verdadera democracia, sin ir más
lejos. Ah, pero los socialistas no quieren soltar poder, ni siquiera
para devolvérselo al pueblo.
Hay
una circunstancia que explica a nuestra clase política. El número
de asesores en el ayuntamiento de Madrid. El PP tiene 31 concejales y
38 asesores; el PSOE. 15 y 32; IU, 6 y 16; UPyD, 5 y 4. Ningún
grupo ha renunciado a sus asesores para ahorrar dinero a los
contribuyentes. ¿Cuántos asesores habrá en los ayuntamientos
españoles?
Ningún
partido ha pensado en aliviar los bolsillos de los ciudadanos
proponiendo la supresión de organismos prescindibles, sino que todos
quieren que el desgaste del gobierno redunde en su beneficio, sin
caer en la cuenta de que el desgaste, en los tiempos que corren, es
de toda la clase política.
En
la Comunidad Valenciana, por ejemplo, la Generalidad no paga sus
deudas. Y ahí están el CJC, el CVC, la AVL, el SdG, y otros
organismos similares que podrían cerrar mañana sin que nadie notara
su falta en mucho tiempo. Pero ahí están, consumiendo unos recursos
que son necesarios para pagar cosas imprescindibles. Pero ningún
partido asume la defensa de los ciudadanos y exige que se cierren.
1 comentario:
Verdades como puños.Muy bueno.
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