lunes, 28 de diciembre de 2015

Carmena da de comer

O de cenar, qué más da. Pero, ojo, sin alcohol, no vaya a ser que luego tengan que conducir y se la peguen. Pero tampoco está claro que haya sido ella, puede que lo hayan pagado los contribuyentes, aunque Percival Manglano ha investigado su patrimonio y resulta que sí que le llega. Sí que habría podido pagarlo ella.
Con su gesto la alcaldesa ha logrado hacerse la foto, para que los que se empeñan en creer en ella puedan seguir haciéndolo. Entre esta gente no pueden estar los socios y simpatizantes de Covite, esta es la verdad.
Afortunadamente, son muchas las personas que a lo largo del año llevan a cabo importantes obras de caridad o se comportan de forma altruista y sin esperar nada a cambio, ni hacerse fotos. Están los donantes, que regalan tiempo y sangre, algunos con bastante asiduidad. Pero nunca son suficientes y hay que tener en cuenta que esa sangre es necesaria para que otras personas puedan seguir viviendo.
Son muchos los que han dado un riñón en vida y esto hay que agradecerlo, porque nos indica que en el ser humano hay bondad suficiente para llevar a cabo estas proezas, lo que ocurre es que hay personas que en lugar de aventurarse por el lado de la bondad toman el camino opuesto.
Mucha gente se ha registrado para ser donante de médula ósea o de órganos.
No hay que olvidar a los que hacen donativos de dinero o de tiempo a Cáritas y otras organizaciones humanitarias, y no se hacen ninguna foto, ni se entera nadie, salvo Hacienda, si han podido hacer alguna desgravación.
Estando en la cola de la ventanilla de un banco vi que una señora, que por su indumentaria debía de ser muy pobre, había ido a cobrar un premio menor de algún sorteo y a renglón seguido ingresó lo cobrado en su totalidad en una cuenta solidaria.

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