Hay
un fulano que se derrite cuando habla de Botín y que todavía se
derrite más cuando se refiere a Felipe González. Ah, qué par.
Emilio Botín y Felipe González. No me tranquiliza ver estos dos
nombres juntos. Y a él le hacen feliz.
La
cuestión es que nos viene explicando que las que han funcionado mal
son las cajas, los bancos no. Y resulta que los bancos que se salvan
se salvan por el negocio en el extranjero, en España tienen miles de
viviendas en sus balances y aplican unas comisiones desorbitadas,
porque han de ganar dinero para pagar los escandalosos sueldos de los
directivos.
Y
ahora resulta que el Banesto va a ser absorbido por el Santander. Yo
tenía entendido que cuando le entregaron el Banesto al Santander fue
con la condición de que conservara la marca, cosa que parecía
demostrar el hecho de que hubieran desaparecido las marcas del
Central y del Hispano y siguiera esa.
Pero
pueden ocurrir tres cosas: Una es que yo recuerde mal; la segunda es
que esa obligatoriedad tuviera un plazo ya vencido; y la última, que
esa condición se haya hecho desaparecer por lo bajini, cosa que no
me extrañaría nada.
Franco
temía al poder de los bancos, por cuyo motivo no les dejaba
fusionarse. Franco ya murió y ahora todo el monte es orégano para
los bancos. Son cada día más grandes y no hay quien les plante
cara. Junto con las inmobiliarias y los políticos que les
consintieron todo, son los principales culpables de la crisis. Las
inmobiliarias han desaparecido, los políticos y los bancos siguen.
Con
la absorción del Banesto por el Santander, se cerrarán más
oficinas e irá más gente al paro. Cosa que no impedirá que el
fulano en cuestión siga alabando a Botín.
España
es el país en el que, teóricamente, los bancos están más
vigilados que en ninguna otra parte. Y, no obstante, van
desapareciendo: Banca Catalana, Banco Central, Banco Hispano
Americano, Banco de Valladolid, etc.
En
España, sobran oligarcas, sobran pelotas y falta democracia.
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