jueves, 9 de octubre de 2008

El debate nuclear

La presidenta del Foro de la Industria Nuclear Española, María Teresa Domínguez, según una información que publica el diario Las Provincias, es partidaria de alargar la vida útil de las ocho centrales nucleares que existen en España y de instalar once más. No es la única que opina de este modo, el propio Felipe González se ha arrepentido de la decisión que tomó y ha escrito algunos artículos en El País mostrándose partidario de que se instalen nuevas centrales nucleares en España.
Las ventajas superan en mucho a los inconvenientes, baste decir que se reduce la dependencia energética en otros países. Hay muchas centrales nucleares alrededor de España, por lo que resulta pueril cualquier tipo de gazmoñería al respecto. España no debería quedar en desventaja con respecto a otros países. Es difícil, no obstante, que se les dé vía libre, puesto que Zapatero ya ha dicho que no. En estos tiempos que corren no hay quien se atreva a llevar la contraria a los líderes de los partidos. Felipe González ya ha dicho que en el PSOE lo tienen como un jarrón chino, al que no saben dónde poner.
La explicación que ha dado Zapatero a su negativa de reabrir el debate nuclear es que estas centrales necesitan mucha agua. Es decir, lo ha decidido él, después de escuchar a los expertos que ha elegido, y ya no hay más que hablar. Aunque cabe la posibilidad de que no haya escuchado a tantos expertos. Puede que en cuanto haya oído hablar de agua, haya tomado la decisión. Porque este presidente del gobierno es esclavo de su imprudencia. Con tal de ganar unas elecciones, tomó una decisión con respecto al agua, que condiciona todas sus actuaciones posteriores.
Con el agua, al igual que con la energía eléctrica, conviene diversificar, disponer de todas las opciones y en cada momento utilizar la que más convenga o la menos mala. Claro que para eso hay que cambiar por completo el modo de hacer política. Habría que aprovechar la crisis, pero esto no tiene visos de que vaya a ocurrir, como no sea que la crisis se lleve por delante a toda la clase política actual.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Y qué hay de uranio como combustible nuclear para las centrales? ¿Hay mucho o hay poco?

Imagino que liquidez y financiación para construir centralez ahora no hay mucha, ¿no?

¿Y para mantenerlas o desmantelar las viejas?

atentamente.