Tengo la manía, y es muy posible que se quede en ello, de que el caso de la Dana le va a explotar en las manos a la juez Nuria Ruiz Tobarra. No me apoyo en el aire, sino en la gran cantidad de artículos de opinión surgidos ante el caso, y también en las actividades, o falta de ellas, de los verdaderos responsables.
No digo que Mazón lo hiciera bien, sino que por encima y al lado de él había otros que también lo hicieron muy mal y que si no hubieran sido tan melones se hubieran podido salvar gran cantidad de vidas. A Sánchez lo bautizaron como «el galgo de Paiporta». Ya ha pasado un año y todavía no ha hecho nada por ninguno de los pueblos afectados por la Dana. La juez solo tiene la vista puesta en el PP. Mazón sí que ha hecho cosas por los afectados, pero a base de incrementar la ya enorme deuda de los valencianos. Le ha faltado energía para cerrar todo lo que hay que cerrar, empezando por la televisión, que de todos modos tiene los días contados. Esta televisión y todas las demás regionales, pero en Valencia es urgente, porque tenemos la deuda más alta de todas las Autonomías.
El caso es que quería hablar de esta juez, que debería acabar pasándolo mal, y se me está terminando la página. La UCO le presentó un informe que ella desestimó y no veo muy claro que tuviera que hacer eso y que los defensores de los acusados lo hayan pasado por alto. A la señora Nuria Ruiz Tobarra no le parece bien el informe, sin duda, porque le descabalga todo su discurso. Pero tanto ese informe, como la chulería y posterior cobardía de Sánchez, deberían tener lugar fijo en el sumario. Aunque la transferencia sobre la Dana esté transferida, lo cual es discutible, el Estado debería haber actuado desde el primer momento.