lunes, 30 de septiembre de 2019

Errejón, el político más atractivo

No lo digo yo, lógicamente, sino que fue una respuesta inteligente de la aristogata a la pregunta tonta de un periodista.
Fue inteligente la respuesta por el citado no figuraba en la lista de los que le habían propuesto como posibles, con lo cual pone en evidencia la estupidez de la pregunta, y porque induce a pensar: ¿por qué Errejón?
No faltarán quienes piensen que despierta el instinto maternal de muchas mujeres, que lo ven como un niño de pecho al que todavía le quedan muchos biberones por tomar. Pero no nos engañemos, esa es su apariencia. En realidad es un ser atroz capaz de defender con fiereza a uno de los regímenes más sanguinarios y dictatoriales que han podido conocer las generaciones vivientes en el mundo.
Para quienes no lo sepan, conviene aclarar que Federico Jiménez Losantos, víctima del terrorismo catalán, se refirió a Iván Espinosa y Rocío Monasterio, como los Aristogatos.
Es posible que Federico tenga aspectos criticables en su biografía, pero también que posee un nivel cultural, un ingenio y una inteligencia, de las que carece Errejón. Y por ahí pueden ir puede andar también la intención de Monasterio, porque Federico hizo una descripción de él que está a la altura de los mejores poemas satíricos del Siglo de Oro. Es extraordinaria.
Dicen que Errejón se defendió acusándolo de hacer lo que él hace, o sea, sembrar el odio. Estos podemitas no saben hacer otra cosa. Aunque dejen este partido para fundar otro, su intención siempre es la misma: hacer el mal. Solo el mal.
Federico, en cambio, tiene cosas buenas y eso no se le puede negar. Tiene un caudal de conocimientos históricos y de todo tipo, con el cual deleita e instruye, aunque reconozco que hace años que lo sigo poco. Aunque sin querer algo llega siempre, de una forma o de otra. Y tengo un libro suyo, de haikus, delicioso.

sábado, 28 de septiembre de 2019

La intención de Torra

Con respecto a lo sucedido con los CDR, y no solo en lo que respecta a la detención de unos cuantos de sus componentes, si no también de sus actividades y sus planes, podría pensarse que lo que desea Torra es que se aplique cuanto antes el 155, ante el temor de que los delitos que se le puedan imputar sean cada vez más graves.
Pero eso sería en el caso de que Torra fuera normal. Pero a la vista de que tiene sus capacidades mentales claramente disminuidas a causa, quizá, de una locura transitoria permanente, como dirían Les Luthiers, resulta complicado saber qué es lo que se cuece en su fuero interno. Vicente Garrido Genovés podría adentrarse en sus vericuetos cerebrales con más conocimiento de causa.
De cualquier forma, aunque su intención fuera la que muchos piensan, choca con piedra, quiero decir con Pedro. Por nada del mundo dará motivo a los socialistas catalanes, que son más nacionalistas que socialistas, es decir, se creen socialistas pero no lo son, para que dejen de votarlo. Lo suyo es engañar, engañar a todos, sobre todo a quienes desean ser engañados, para el final llevarse el gato al agua. Algunos lo tildan de calzonazos, pero yo no creo que lo sea. Nunca cede el paso a su mujer, sino que se la deja atrás, como si no existiera. Solo piensa en sí mismo. Otro que tal, pues. Yo soy el presidente, yo soy el presidente, yo soy el presidente. Lo que ocurre, seguramente, es que es un presumido de marca mayor y Begoña le aplaude cuando se da cuenta de que necesita los aplausos. Y ahí están los dos, uno cometiendo fechorías y la otra aplaudiéndoselas. Dios los cría y ellos se juntan.
Todo el mundo sabe que en tiempos no tan lejanos, Torra estaría recluido en un psiquiátrico y a ratos con la camisa de fuerza. No cabe duda de que muchos añoran esos tiempos. 

jueves, 26 de septiembre de 2019

Marlasca se cabrea con la GC

Parece ser que en la Cumbre el Clima, a la que se desplazó en un avión de esos que no contaminan nada -porque cualquier cosa en la que él se suba no contamina-, a disputarle el estrellato a Greta Thunberg, y allí se enteró Sánchez de que la GC había detenido a unos cuantos CDR y le molestó no haberlo sabido antes.
¿Qué necesidad tenía él de saberlo? Es curioso que alguien que le tiene declarada la guerra a la verdad, que desprecia y menosprecia a la verdad y se ríe de ella, quiera saber la verdad. La gente es de una inconsecuencia que al final resulta jocosa. Al enterarse del asunto, allí, entre los líderes del mundo, los que fueron, y la niña emergente, como nuevo icono al que hay que rendirse para no ser considerado facha, podría haber dicho cualquier cosa que se le ocurriera, cuanto más gorda mejor. Que es lo que suele hacer, por otra parte, y ahí lo tenemos con su coletilla recurrente: yo soy el presidente, yo soy el presidente, yo soy el presidente. Por cierto, al que le suceda en el cargo también le cambiarán el colchón, pero no lo va a ir contando por las esquinas.
A Marlasca saber que el jefe estaba cabreado lo puso de los nervios y se apresuró a echarles la bronca a sus subordinados. A Marlasca hay unas cosas que lo ponen de los nervios y otras que no. Por ejemplo, los de Ciudadanos ya le han visto el plumero, o sea, que saben de que pie cojea. Y mucho.
Sin embargo, si una ministra dice de él que es maricón, lo tolera tranquilamente. Pelillos a la mar, no nos vamos a pelear por eso. Si su jefe pacta con Otegui para ser presidente, pues miel sobre hojuelas, porque de ahí sale él ministro. Que si Chivite en Navarra...


miércoles, 25 de septiembre de 2019

La realidad de los CDR

Con respecto a los asuntos de Cataluña conviene tener en cuenta algunas cuestiones. En primer lugar, que no todos los catalanes se han tragado todas las trolas de los catalanistas.
En segundo lugar, que todos los catalanes se han tragado una o más de las trolas de los catalanistas. Se puede observar que se creen el ombligo del mundo y que son muchos los que tienden a usar ese artefacto lingüístico que se sacó de la manga un tal Pompeyo Fabra, empeñado en que se notara que su simpatía por España era nula.
Ambas cosas son patentes en el digital Dulce Cataluña, cuya labor, por otra parte, es digna de encomio. De ese sitio, he sacado esta perla, tan propia del catalanismo: «Los catalanes tenemos más bien una relación antropológica con la violencia bastante nefasta. Es decir: esto de la guerra, de las armas y de la manipulación de productos que pueden herir no es de las cosas que nos vaya mejor antropológicamente», lo cual lleva directamente a lo que leí en el blog ‘Salmonetes ya no nos quedan’: «una máxima de don Torcuato fue: “Si ves venir hacia ti un toro y un tonto, ¡vete al toro!».
Hay una operación judicial, a resultas de la cual han detenido a varios CDR. Hay que recordar que estamos en una democracia y que, consecuentemente, los jueces hacen su trabajo en defensa de la sociedad.
Y aquí aparecen los catalanistas, a cual más cobarde, más embustero, más vil, más ignorante. Algunos rufianes no tienen ni idea de nada, pero saben vivir del cuento. Y luego están esos caganers que al secesionismo le llaman independentismo, a los prófugos exiliados, y al quebranto de la ley le llaman democracia, aunque bien es verdad que a esta palabra le ponen un palito no sé donde, con lo cual está claro que no hablan de democracia. No tienen ni idea de lo que es. El caso es que todos esos, antes de conocer el sumario que, -por ahora, es secreto, ya están criticando la actuación judicial, a la que llaman policial. 

martes, 24 de septiembre de 2019

La utilidad de Greta Thunberg

Dice que le han robado sus sueños y su niñez. Yo la llevaré a conocer niños a los que les han robado los sueños y la niñez. Y se los ha robado a conciencia y con conocimiento de causa la maldad humana.
Hay millones de niños en el mundo que pueden decir eso, a veces también a causa de alguna enfermedad, y han de callar.
No cabe duda de que esta Greta es una niñata, como si fuera un rufián cualquiera, un torra, un hombre de paz. El hecho de que haya conseguido llegar a la ONU a dar ese discurso con el que se burla todos demuestra que el cambio climático, además de lo que haya podido decir el secretario general, es un negocio. Casi se puede afirmar que, como suele ocurrir, quienes más contribuyen a que se dé, seguirán actuando exactamente igual. Y quienes menos culpa tenemos de que ocurra sufriremos alguna subida de impuestos, o un impuesto nuevo y específico, que irá a parar a través de alambicados caminos a algunos bolsillos particulares. Me refiero a las naciones que más contaminan y que seguirán contaminando igual.
Pero tienen suerte esos adalides de la lucha contra el cambio climático. Ha llegado hasta allí, a hacerse cargo de la situación y a explicar a los jóvenes el arte de la cuadratura del círculo, el gran Sánchez. Es grande porque seguramente ha conseguido que el Falcon no contamine, motivo por el cual lo utiliza a todas horas, incluso para ir al bar de la esquina dicen, para que lo vean y lo aplaudan y les explique los pecados de la derecha. También es grande, porque soplando desde Doñana, entre caña y caña, consigue apagar el fuego de Canarias, con lo cual luego, si acude a hacerse la foto, pues tiene todo el derecho.
Así que Greta que no llore tanto, porque lo tiene todo de cara, y hemos visto llorar con más fundamento. Y con menos también. A Irena Montera.


lunes, 23 de septiembre de 2019

Lo de Amenábar

Esto, «Franco todavía está muy presente» y «la España actual es la que él ideó», es de una torpeza insuperable.
Franco está muerto y enterrado y si hay quien no lo puede olvidar, que lo hay, debería ir al psiquiatra. La segunda afirmación es imposible. Nadie puede hacer que los habitantes de una nación caminen en una dirección determinada y, además, durante tanto tiempo. Todo lo más que se puede hacer es prever lo que puede ocurrir, pero de poder, lo podría hacer muy poca gente en el mundo, alguien dotado de unas condiciones excepcionales.
Más atinado parece FjL cuando afirma que los comunistas no le perdonan a Franco que sea el único que les ha ganado una guerra. Lo de Federico puede que no sea cierto, pero al menos tiene lógica.
Claro que a lo mejor lo que persigue Amenábar es que le den subvenciones y para ello ha de pasar por tonto pues lo hace.
La guerra civil fue una catástrofe para España, si no hubiera ocurrido estaríamos mucho mejor, no cabe duda de ello.
El gobierno de la República, que algunos, con muy mala intención, nos quieren hacer creer que era modélico, tenía la obligación moral de tratar la guerra por todos los medios. Es indudable que no movió ni un dedo para evitarla, hasta el punto de que algunos historiadores, como es el caso de Stanley G. Payne, piensan que la quería, porque pensaba que la iba a ganar fácilmente y luego tendría las manos libres para actuar como quería.
La izquierda, o parte de ella, tenía unos planes y Franco se los madrugó. Fue más listo, o más pillo. Eso es lo que no le perdona esa izquierda. No que fuera un dictador, porque otros dictadores le caen bien, sino que le desbaratara sus planes.
Franco tuvo mucha suerte, porque murieron, en distintas circunstancias y sin que él tuviera que ver, Sanjurjo, Mola y Primo de Rivera. Cualquiera de los tres le habría complicado mucho las cosas. 

domingo, 22 de septiembre de 2019

La actitud de Torra

Digamos que el presidente del gobierno regional catalán, como tantos otros, es un elemento grotesco y estrafalario. Presume de desafiar al Estado, pero ejerce, aunque mal, de representante suyo en Cataluña y cobra de él. A esta clase de individuos se les conoce como fantasmas, porque presumen de lo que no son, ni pueden ser.
Es cierto que este asunto, por la particular y estúpida configuración política, ha llegado a ser muy peligroso para España y sigue albergando mucho peligro, pero todo esto se podría acabar pronto: bastaría con que el PSOE insinuase algo en este sentido para que el PP se adhiriese rápidamente a la idea.
El Estado es la totalidad de los ciudadanos que lo sustentan. Los políticos son los encargados de cuidar y proteger los bienes del Estado y cobran por ello. Son empleados de los ciudadanos. Todo lo que haga un político en contra del Estado que le paga es una traición. También es una traición, por dejación de funciones, permitir que otros actúen de forma desleal con el Estado.
Se está viendo en otras latitudes, en las que quienes promueven iniciativas lesivas para sus Estados, como la independencia de Escocia o el Brexit, o la independencia de Quebec, lo hacen todo dentro del más estricto respeto a las leyes y al orden constitucional.
Nada de eso ocurre en España y es lo que permite saber que los españoles, como
Torra u Otegui, que trabajan, es un decir, en este sentido, son peores personas que aquellos.
El bravucón de Torra, por otra parte, que tiene la pancarta en la que pide libertad para ‘los políticos presos’ y ‘los prófugos’, él lo dice de un modo más ridículo, los mantiene en la cárcel. No se ha atrevido a soltarlos.
De modo que si mantiene alguna comedieta, será por algún motivo que se nos escapa. O no.

sábado, 21 de septiembre de 2019

Frases de Sánchez para la historia

A estas alturas, ya todo el mundo sabe (salvo los ciegos voluntarios de Saramago) que lo único que quita el sueño a Sánchez, e incluso puede que le provoque pesadillas, es la posibilidad de tener que abandonar la Moncloa.
Que quisiera mortificar a los podemitas también es normal en él, y de paso justificarse ante sus propios votantes que no veían tan mal la alianza con los comunistas. Hay socialistas nobles y hay socialistas dispuestos a aceptar el compadreo con Otegui, o con Iglesias, pero nunca con el PP.
En fin, sobre Sánchez ya hay mucha información, pero por si algunos no se han enterado aún, él ya se ha retratado de forma suficiente en un solo discurso:
«los españoles ya hablaron. Y hablaron claro. Hablaron claro el pasado mes de abril y hablaron aún más claro el pasado mes de mayo».
«Les pediremos a los españoles que lo digan aún más claro el próximo 10 de noviembre para que se respete el resultado electoral y todos los demás partidos lo atiendan».
«Los españoles han dicho claro en cuatro ocasiones, el pasado mes de abril y el pasado mes de mayo, que España quiere caminar por la senda progresista y que quiere avanzar con justicia social. Les pediremos el próximo 10 de noviembre que lo digan aún más claro».
«Lo dijeron el pasado mes de abril y el pasado mes de mayo: que quieren un gobierno coherente, sólido. Les pediremos que lo digan aún más claro para ser escuchado y que no haya más bloqueos».
Todo eso está aquí:
Parece tonto, pero no lo es tanto. Todo eso que dijo, que no se lo puede haber escrito nadie más que el mismo (es curioso esto, dada su afición a los plagios) ha surgido del alto concepto que tiene por sí mismo. Si el texto hubiera tenido que ser más largo y le hubiera quitado mucho tiempo de mirarse al espejo, se lo habría encargado a Iván Redondo o a Irene Lozano, y el discurso habría sido menos evidente.