miércoles, 30 de junio de 2021

Lo del pequeño saltamontes

 

Creo que fue en la serie en que aparecía el pequeño saltamontes en donde apareció esa muestra de la sabiduría oriental que desde entonces cita mucha gente e incluso intenta llevarla a la práctica. La idea es esta: «Cuando hables, procura que tus palabras sean mejores que el silencio».

Aquí Castells, todo un ministro: «condenar a la gente a perder años de vida en un momento clave simplemente porque ha habido en algún momento un suspenso me parece totalmente injusto, elitista y es así como se va machacando a los de abajo y favoreciendo a los de arriba». Los demás ministros se lo han comido sin rechistar, porque tienen las tragaderas, dicho en fino, como un bebedero de patos. Para otro granuja, digo para otro ministro, las actuaciones del Tribunal de Cuentas son piedras en el camino. Tanto tiempo como llevábamos los españoles suspirando por la democracia y llegan estos.

Las dos Montero, o Montera, es difícil saber cómo decirles, porque una y otra desbarran y siembran la zozobra en el personal que está atento a la actualidad, porque hay otras personas que se hacen una idea de las cosas, que ni siquiera se acerca a la realidad, y dan por hecho que son como piensan.

Uno de los ministros se presenta como astronauta, lo admirábamos por este motivo y, a la vista de esa carita tierna que se gasta, hasta lo teníamos por buena persona. Pero ha resultado ser el Astronauta. Y con eso está dicho todo. Es mejor que haga caso al pequeño saltamontes y que calle.

Hay una que es de Cabra y otra en la que algunos habían visto indicios de sensatez y confiaban en ella. Y otra, del ámbito económico, toda obsecuencia. Nada extraño.

En el Felón, algunos ven indicios de autoritarismo. Lo nadie puede ver en él es nada que tenga que ver con las democracia. La impresión que deja cuando habla es que habría sido mejor que callara.

martes, 29 de junio de 2021

A favor de que les quiten el dinero

 

Me parece muy conveniente que el Tribunal de Cuentas intente recuperar todo el dinero que pueda del mucho que se les ha detraído a los contribuyentes para utilizarlo en contra de los intereses de ellos.

El Felón puede enfadarse con los componentes de esta institución si cumplen con sus obligaciones, porque él, ajeno a cualquier ‘veleidad’ democrática, puesto que es un dictador de pura cepa, como todo psicópata que se precie, sólo acepta que los demás se plieguen a sus caprichos o necesidades del momento.

Si el Tribunal de Cuentas hace su trabajo de forma satisfactoria para los contribuyentes, aunque la Calva descerebrada no esté de acuerdo, porque dice que el dinero público no es de nadie, luego el Felón puede intentar que ese trabajo quede en agua de borrajas. El Felón piensa que tiene derecho a hacer lo que le dé la gana y que los demás tenemos la obligación de obedecer a Su Persona, aplaudir a Su Persona, contemplar a Su Persona. Pero el Felón es uno de esos artificios aparentemente bellos que aburren al cabo de un instante. Es el envoltorio de una caja que no contiene nada dentro.

Y ahora esos catalanistas que llevan una eternidad gastando dinero de los contribuyentes en contar mentiras que supuestamente les favorecen a ellos y perjudican al resto de los españoles. Los catalanistas son muy ‘listos’. Lloran, les dinero para calmar su pena. ‘la pela es la pela’, y lo gastan en difundir falsedades e infamias.

Todo eso que hacen con el dinero de los impuestos perjudica a todos, incluso a ellos, porque han conseguido empobrecer a España, pero han arruinado a Cataluña.

Hay un conde, al que el Rey, en un gesto bonachón, hizo Grande de España. Ese conde tiene un periódico que pudo ser el mejor de España, pero lo ha convertido en un panfleto, en algo superfluo, en el emblema de lo que pronto desaparecerá. Estamos en tiempos de cambios.


lunes, 28 de junio de 2021

A favor de Plácido Domingo

 

Hay gente pedorra -simple como el pedo de un asno- en este gobierno que insiste en llevarnos a la ruina que tras erigirse en juez, abogado defensor, fiscal y verdugo, todo al mismo tiempo, intenta hundir al, según muchos, mejor tenor de todos los tiempos. Lo cierto es que da gusto escucharlo.

Mientras tanto, esa misma gente pedorra es capaz de indultar a quienes han hecho un gravísimo daño a España y fueron condenados a penas muy inferiores a las que les deberían haber correspondido. El castigo que se les impuso no guardaba proporción con el que les cayó a otros que habían hecho mucho menos daño. Y ahora indultan a esos, los elevan a los altares, o casi, y quienes lo hacen tratan de hundir a un tenor fabuloso.

Pero es que también esta gente pedorra manipuló a Juana Rivas de tal modo, que luego la justicia italiana la puso fina, también la española, y no obstante sigue con su intento de manipularla, de un modo tan burdo y tan simple que no sólo causa enfado, sino que también da asco, que se acrecienta al ver que en lo que respecta al gran tenor la inmundicia sale a relucir desnuda.

No ha habido ninguna denuncia en los juzgados contra Plácido Domingo, y las denunciantes lo hacen de modo anónimo, por lo que no conocemos los pormenores, ni el contexto, ni todos esos datos que habría necesitado un juez para saber a qué atenerse.

Si se sabe a ciencia cierta que la víctima de esa gente pedorra -simple como el pedo de un asno-, el tenor Plácido Domingo, es valiente y abnegado. Ha luchado con denuedo contra una secta, aparte de otros gestos de inusitado valor, que la gente pedorra no es capaz de llevar a cabo.

Hay que rendir homenaje a una señora, elegante, refinada y valiente, que también canta como los ángeles y que ha salido en su defensa: Ainhoa Arteta.


domingo, 27 de junio de 2021

La equis en la declaración de la Renta

 

Hubo un Setién, cuyo recuerdo tiene que provocar náuseas en quienes saben* que la sociedad española está deuda con las víctimas del terrorismo, que dijo que no está escrito en ninguna parte que los padres tengan que querer a todos los hijos por igual.

*Los que apoyan al Felón no lo saben.

Desde las primeras canalladas del tal Setién que dejé de poner la equis en donde pide la Iglesia, e incluso de ir a la iglesia.

Sí que está escrito que hay que querer a todos los hijos igual, está implícita y explícitamente en la doctrina de la Iglesia Católica, y todas las buenas personas lo sabrían aunque no estuviera escrito en ninguna parte.

Puesto que a este individuo no lo expulsaron inmediatamente de la Iglesia, sino que siguió siendo obispo o cardenal, o lo que fuera, y los curas de su diócesis, salvo raras y heroicas excepciones, estaban a su altura, decidí que mi camino iba por otro lado.

Si los curas ni siquiera intentan comportarse según su credo, no deben esperar que nadie les siga. Sólo los de la fe del carbonero pueden hacerlo.

Los curas de Cataluña también se comportan del mismo modo. Por tanto, si ellos optan por su conveniencia personal, por adaptarse a los caprichos de los catalanistas enloquecidos, que tanto daño hacen al mundo, en lugar de predicar el bien y exhortar a sus feligreses a cumplir las leyes y comportarse según exige la doctrina cristiana con sus semejantes, la actitud más correcta es apartarse de ellos para no ser alcanzados por su veneno.

Faltaba el papa de Roma que, al igual que muchos de sus antecesores, no pudo ser elegido por inspiración del Espíritu Santo. Ha dicho que el derecho a la propiedad privada no es intocable ni absoluto. Hoy por hoy, el derecho a la propiedad privada es la base de la civilización. Quizá pretenda socavarla.

Si lo que promueve la Iglesia es el mal, es mejor olvidarla.


sábado, 26 de junio de 2021

El Felón y las fuerzas telúricas

 

Dice Teresa Giménez Barbat en su libro

https://www.periodistadigital.com/cultura/libros/20210510/mil-dias-bruselas-teresa-gimenez-barbat-noticia-689404469293/ que el Felón visto de cerca es todavía más guapo. Bien, pero a mí me resulta repugnante. Y su santa, que a lo mejor no es tan santa, porque acepta cargos, prebendas y nóminas sólo por ser ‘esposa de’ (en este gobierno abundan casos así), también me resulta repulsiva.

Quiero decir que esta gente, el Felón y los que bailan a su son, creen que encadenando mentiras, falsedades y traiciones pueden eternizarse en los cargos que ocupan y seguir haciendo el mal. Si solamente fueran las ‘medidas de gracia’ que dice ese para evitar la palabra indultos… Pero es que no paran. Tienen el infierno ganado más de mil veces. Ya sé que dijo un papa que el infierno no existe. Ellos lo inventan, ellos lo borran. Pero a algún sitio tendrá que ir esta panda de golfos. Se llamará infierno, arderá el fuego, o tendrán que verse enteros todos los vídeos de Iñaki Gabilondo, o quizá tengan que ver a través de un agujero como el del Aleph, de modo incesante, todas sus andanzas, para que no les quepa ninguna duda de lo miserables que fueron en vida. De lo miserables que son, hablando en presente.

Otros, infinitamente más inteligentes que ellos, han comprendido eso de que no se puede engañar a todos todo el tiempo. Por muy guapo que sea, el tiempo del Felón se acaba. Y el que quienes le acompañan sin pestañear en sus vilezas. Nadie es perfecto. Dicen las crónicas que Sócrates era feo. Pero qué diferencia hay entre un sabio y un necio, entre un benefactor de la humanidad que dijo que la ley debe cumplirse, a pesar de que de modo injusto le perjudicaba, y un aprovechado, que no piensa más que en aprovecharse de la humanidad retorciendo las leyes todo lo que le dé la gana. Sancho Panza tampoco debió de ser guapo y jamás traicionó a Don Quijote, ni lo engañó, ni trató de sacar provecho de su locura.


viernes, 25 de junio de 2021

La Calva ataca a la democracia

 

Iván Espinosa de los Monteros explicaba en el Congreso de los Diputados su concepto de nación, con el que no necesariamente hay que estar de acuerdo, pero sí con su derecho a explicarlo. Y sea cual sea el concepto de nación es evidente que el gobierno del Felón, al que pertenece Carmen Calvo, la ha traicionado, ya que ha antepuesto su interés personal, que consiste en seguir siendo el presidente, al de todos los ciudadanos, que no puede ser otro que el imperio de la ley.

La universidad que le dio el doctorado a la Calva debe de estar avergonzada desde hace años, en el caso de que tenga vergüenza, porque esta cualidad hace tiempo que va menguando. Son motivo de risa los disparates de la Calva que se van sucediendo, como los de ‘el dinero público no es de nadie’, ‘no bonita…’, etcétera. Ella, actuando en su propio nombre, como Carmen Calvo, tiene derecho a demostrar todas las veces que quiera que es imbécil, pero como ministra o vicepresidenta debería respetar a las personas a las que representa. Si todos fuéramos imbéciles, estaría bien lo que dice, pero creo que no es así, no todos somos como ella.

Puesto que la señora no tenía argumentos -en realidad, nunca los tiene-, insultó a su interlocutor y a su partido, Vox. Una persona que tiene responsabilidad institucional no puede decir las cosas así como así. Si llama filofascista a algún partido, tiene que argumentar ese epíteto. Colgar, sin más, un sambenito es propio de gamberros.

Y, además, tiene más pinta de fascista el Partido Sanchista Obrero Español (Guerra dixit y pixit) que Vox, puesto que en él prevalece el capricho de quien manda al orden constitucional.

Por otro lado, no cabe perder de vista que bajo el imperio del Felón, que no de la ley, el Parlamento va camino de convertirse en una exposición zoológica, como se puede apreciar aquí, https://twitter.com/VicenteTorres/status/1407721345253875715, en el que aparece un animal contemplativo según con quién, y otro de una especie indeterminada, que no es de las más inteligentes.


jueves, 24 de junio de 2021

Socialistas satisfechos con el Felón

 

Hay socialistas que apoyan al que probablemente es el presidente de todos los tiempos, por interés y también porque son malintencionados, y otros que tienen esa misma actitud porque son bobos. Ante lo irremediable de la felonía e incapaces de decir no, dieron en justificarla.

Para algunos de estos sería una herejía votar al PP, partido que es cierto que cuando ha gobernado ha hecho barbaridades equiparables a algunas del PSOE, como la creación de la AVL en Valencia, pero al menos han reducido los índices del desempleo.

Esta última del Felón será difícil de igualar. Ha negado casi el noventa y nueve por ciento de las peticiones de indulto, con condenas leves e informes favorables, porque los psicópatas son así, y se lo ha concedido a los peores, a los que más daño han hecho, y han formulado su deseo de seguir haciéndolo, con todos los informes desfavorables.

Dicen que al no recurrir los indultos los interesados reconocen implícitamente sus delitos y el imperio de la ley. Pero eso sería en un lugar civilizado. O sea, desde el año 960 rige en Valencia el Tribunal de las Aguas, cuyos fallos han sido cumplidos escrupulosamente a lo largo del tiempo. Eso es la civilización, que ahora está en peligro, porque Valencia ha caído en manos de los salvajes catalanistas.

España ya no es país civilizado, porque ahora baila al son que marcan un Felón y los socios que necesita para poder seguir haciendo maldades.

Esos socialistas bobos, mediante cuyo apoyo ese individuo nefasto sigue en la presidencia del gobierno, hundiendo el prestigio internacional de España, deberían darse cuenta de que están a la altura de Otegui. Por nombrar a uno de los infames.

Hubo otros socialistas de ideales mucho más elevados y algunos de ellos pagaron con sus vidas estas circunstancias. Y hay otros socialistas más decentes a los que se pretende expulsar o se les ha expulsado.


miércoles, 23 de junio de 2021

Moralmente, siempre serán delincuentes

 

No es que yo haya mirado la bola de cristal, porque ya ni recuerdo donde la tengo guardada, es que a esos tipos -entre esos tipos y yo hay algo personal- no se les ve ni un átomo de sensatez, ni un indicio de inteligencia, ni un amago de vergüenza. No cabe esperar, pues, nada bueno de ellos.

Han hundido la economía de Cataluña y han perjudicado gravemente la del resto de España. Han roto familias y amistades, y han generado corrientes de odio que tardarán mucho en ser erradicadas. Con este último afán han salido del sitio en el que deberían haber pasado el resto de sus días. La justicia poética sería que, ya que ellos no, el Felón acabara sus días en la cárcel.

Felipe González y Alfonso Guerra, los ídolos de Javier Cercas, estarán satisfechos. Ellos renovaron el PSOE, y fruto de esa renovación ha sido esta inmundicia. Ya se ve que se esmeraron al sentar las nuevas bases del partido. Apuntaba maneras ya en los tiempos de esos dos, cuando por debajo de la propaganda asomaba la vileza, un tanto disimulada, querían hacer creer que era otra cosa. Hubo socialistas insignes que se lo creyeron. Ellos eran otra cosa. Unos cuantos socialistas de entonces, no de la primerísima fila, tenían ideales, eran otra cosa. Luego llegó un zapatero, ¡Rodríguez Zapatero!, y con él la vileza ya indisimulable, incluso con algunos de los suyos. Parecía que el PSOE había tocado fondo, pero luego fue el turno del Felón, que ha demostrado que no hay fondo. Todo se puede empeorar siempre. El suyo es el peor gobierno de toda la historia de España, por el momento. Que no cante victoria este pájaro. Otros vendrán que bueno te harán.

Lo propio de un felón es la traición. Siempre la traición. Acompañada en el caso de este por la sonrisa que ya todo el mundo sabe que es boba.


martes, 22 de junio de 2021

No puede salir bien

 

Estos tipos no se enteran. Hay que volver al principio para darse cuenta del detalle: Franco le entregó el poder a Juan Carlos I. Antes de eso, lo había cuidado escrupulosamente, porque le iba la vida en ello. El ya entonces Rey se lo dio a los partidos políticos, para que se lo devolvieran al pueblo. En lugar de eso, los partidos se lo quedaron para sí, y como los políticos no temen por su vida, sino por su porvenir, se dejaron arrebatar grandes porciones a cambio de sentarse luego en consejos de administración.

Es decir, los presidentes del gobierno han estado actuando por delegación de Franco y con esa misma delegación han cambiado sus huesos de sitio.

Cuestión distinta habría sido si hubieran devuelto el poder al pueblo. Es decir, si el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial fueran totalmente independientes unos de otros. Y estuvieran prohibidas las subvenciones a los medios. En este caso, el Ejecutivo sí que actuaría en representación del pueblo. En el caso actual es obvio que actúa por capricho. Incluso alguien tan corto como el Chepas, si estuviera en su lugar, sabría que nadie, o sea, nadie, se puede fiar de él. Pero el Felón es todavía más corto. Ha dicho: «Por supuesto, no nos engañemos, no pensamos que quienes aspiran a la independencia vayan a cambiar de ideales. No esperamos tal cosa. Lo que sí esperamos es que se comprenda que no hay caminos fuera de la ley». A lo que aspiran esos es a la secesión y lo que se suele hacer con todos los delincuentes, para que comprendan que no hay caminos fuera de la ley, es mantenerlos una temporada a la sombra.

Lo que va a hacer el Felón, con el fin de poder seguir traicionando a los ciudadanos, españoles y extranjeros que pagan impuestos en España, es empeorar algo que está mal por culpa de todos sus antecesores.

El Felón es el peor.


lunes, 21 de junio de 2021

La ministra del paro y el Felón

 

En el actual numerosísimo grupo de ministros, en el que a pesar de ser tantos no hay ni uno bueno, hay unos cuantos que son comunistas, pero no adscritos al eurocomunismo, que era compatible con la democracia, sino al de los primeros tiempos, al de Lenin y Stalin. Entre ellos está esta ministra que, como todos los de su partido, necesita que haya mucha gente desesperada para poder llevar a cabo su revolución.

Se ha avisado una y otra vez que la subida del SMI perjudica a la creación de empleo, pero ella insiste en que se haga. Si de verdad le preocuparan los trabajadores, sería más prudente, procuraría no perjudicarles. Pero no, a ella le importan los fines de su partido, no los trabajadores.

Esta señora suele dar mítines, sonriendo, jugando con su melena rubia, y diciendo cualquier cosa que se le ocurra con tal de que no sea verdad.

Pero hay un señor que la ha pillado en un asunto tan grave que, según ella, obliga a dimitir. Pero claro, cuando lo dijo se refería a otra persona, no a ella que, como buena comunista, cree en la impunidad.

Un periodista no contaminado por las subvenciones la ha pillado:

https://twitter.com/carlesenric/status/1406884814645600256

Y un seguidor suyo ha aportado datos -otros también- que hacen reír:

https://twitter.com/CutillasES/status/1406640525772460033?s=20

Hasta tres veces atacó el Felón a Cifuentes por algo que, con toda su cara dura, le perdona tres veces a la actual ministra del paro. Lo que sorprendería de este tipo es que hiciera algo bien. Pero es que también la propia ministra comunista atacó sañudamente a Cifuentes por algo que en su caso era mucho peor.

Si se les mostrara al Felón y a su ministra del paro lo que hicieron con Cifuentes y lo que hacen con sus plagios y sus másteres falsos se partirían de risa. De vergüenza, nada. Vergüenza deberían tener los socialistas que les apoyan.


domingo, 20 de junio de 2021

La farsa de Anne Applebaum

 

En su libro ‘El ocaso de la democracia’, Anne Applebaum da a entender que habla con conocimiento de causa y ajustándose a la realidad de los hechos, por cuyo motivo sus amistades, que en una fecha determinada cifra en un centenar, disminuyen drásticamente. Personas que habían sido amigas y que cambian de acera si la ven venir, etcétera.

Para quien no conozca los pormenores de la política de los países de los que habla, lo dicho por ella, tal es su tono, puede parecer tan verídico como si lo hubiera sacado de la Biblia, pero al llegar a las páginas en las que habla de España, en las que no hay ni una sola verdad, no queda más remedio que darse cuenta del engaño. Lo leído anteriormente pierde todo su valor. No es que ella haya echado un vistazo por encima a la situación y la haya interpretado mal. Es que se nota que no ha investigado nada. Presumiblemente, uno de esos eurodiputados de los que habla Teresa Giménez Barbat en su ‘Mil días en Bruselas’, filibusteros antiespañoles, cuyos nombres ni siquiera merece la pena recordar, le ha contado un rollo infantiloide y lo ha transcrito tal cual. Es tan simple que da vergüenza. Es de la categoría intelectual de un Rufián, un Otegui, una Montero, una Colau.

En la portada del libro pone que esta señora ganó el Premio Pulitzer, lo cual es una deshonra para este premio. No sé si quedará alguno limpio. A estas horas, no tener ningún premio es indicio de honradez.

La editorial es Penguin Random House. Tiene que saber que contiene una sarta de mentiras, que vende una porquería como si fuera jamón de Jabugo. Debería haberse negado a publicar esto. ¿Cómo puede comprar alguien algo para que le mientan? A nadie debería gustarle que le cuenten mentiras, salvo que esté enfermo.


sábado, 19 de junio de 2021

La facultad del perdón

 

Sin ella, el ser humano no sería tal, sino un animal más. Eso no significa que todos la posean, sino que hay esforzarse para conseguirla. Hay que intentar ser buena persona (todos los que creen que lo son, no lo son). Lo propio de la gente ruin es la venganza, lo cual se nota en aquellos que por cualquier motivo, generalmente relacionado con el síndrome de Procusto o cualquier otra cuestión del mismo nivel moral, como el clasismo, el sectarismo, el tribalismo o el cálculo, le hacen la cruz a alguien y ya es para siempre.

Lo del Felón es otra cosa. Él, actuando en nombre los españoles, hace honor a su condición y los traiciona. El pueblo español, salvo excepciones, como el propio Felón, los sediciosos catalanes y otras gentes infames, es generoso y capaz de perdonar. Pero en este caso no se dan las circunstancias para que se pueda perdonar. Los delincuentes no se han arrepentido, ni prometido que no lo volverán, condición indispensable para que el perdón pueda ser efectivo, sino que, por el contrario, dicen y repiten que lo volverán a hacer.

Por su parte, el pueblo español está deseando perdonarles, pero observa con estupor que nos dimos entre todos, en una acción pura y netamente democrática, son vulneradas una y otra vez y siempre por los mismos sinvergüenzas.

Unos quieren perdonar y no pueden y otros quieren delinquir y se les permite. Hubo un bobo que avisó a Rajoy, entonces presidente del gobierno: no subestime la fuerza del pueblo catalán, le dijo. Pero no se refería al pueblo, sino a parte de él, los catalufos. Lo que hizo ese bobo fue menospreciar la fuerza del pueblo español. Ahora hay un felón que se dispone a hacer lo mismo. El pueblo español quiere perdonar, pero no puede. Los delincuentes quieren seguir delinquiendo. En medio, un Felón y un mini Rasputín.


viernes, 18 de junio de 2021

¡Ojo con Botín!

 

Ha dicho la señora Botín: «En los próximos trimestres nos vamos a salir del mapa: España puede crecer entre un 8% y un 9%». Hay que recordar que en tiempos de Zapatero también su padre se fotografió algunas veces con ese botarate, por no decir algo peor, para tranquilizar al personal explicando que hacía lo correcto.

El desplome económico fue brutal y no es probable que nos recuperemos jamás, pero seguramente a Botín y a su banco les fue bien.

Hay que recordar, porque el personal se olvida pronto, que en España sufrimos dos crisis, la mundial, que nos afectó de modo indirecto, y la de la burbuja inmobiliaria, que se produjo a causa de la incompetencia de Zapatero y de muchos empresarios, que a pesar de tener los medios unos y otros no la vieron venir. Nadie se siente responsable.

El caso es que en el tiempo en que el Sr. Botín apoyaba a Zapatero apareció esta nota: «Es también conocida la intervención de autoridades públicas para proteger al Sr. Emilio Botín de las pesquisas de la propia Agencia Tributaria. El caso más conocido es la gestión realizada por la ex Vicepresidenta del Gobierno español, la Sra. De la Vega, para interrumpir una de tales investigaciones» en este blog

http://www.vnavarro.org/?p=6413&lang=es

Es decir, conviene no perder de vista que quien gobierna es el Felón, y que aunque le pongan las bolas de billar conforme se las ponían a Fernando VII, también felón, pero menos, ese no atina ni una, porque todo se lo hacen, los libros, la cama, seguramente el pelo, y lo único que sabe hacer es mirarse, para ver lo guapo que está.

De modo no hay que fiarse en lo que diga un banquero, en primer lugar porque su pericia es tal que han desaparecido muchos bancos, y los que quedan a lo mejor no es por ser más competentes, sino más pillos.

En la situación que vivimos no es prudente sembrar expectativas si no se está absolutamente seguro de que se van a cumplir. Y con el Felón todo es dudoso.


jueves, 17 de junio de 2021

Felipe VI en Liliput

 

Los liliputienses eran unos seres diminutos que, entre todos, inmovilizaron a Gulliver, sirviéndose para ello de innumerables ligaduras.

Es el caso del Rey de España, cuya talla moral es gigantesca si se la compara con la de quienes le tienen inmovilizado utilizando para ello la Constitución a la que atacan, a pesar de que le han jurado lealtad, y cobran sus sueldos gracias a ella.

Al mamarracho presidencial, del que se ríen en todo el mundo, y especialmente en Marruecos y Estados Unidos, hay que sujetarle los espejos y decirle que es el más guapo y el más inteligente (¡mentira, es muy torpe!). Todo lo que toca, si antes era malo, aunque pareciera bueno, lo empeora y lo pudre, bien sea marlasca, hojarasca o borrellasca.

El muñequito que con más gracia le sostiene los espejos usa un peluquín tan bien pegado a su cráneo que si cayera por el barranco con su jefe (no sucederá, o sea, intentará no caer con su jefe) no se le desprendería.

Hay gentecilla de Cabra capaz de avergonzar a las cabras, hay gentecilla relacionada con la tauromaquia, pero también con las delcys, las maletas, las mentiras, la desvergüenza, la chulería o la obsecuencia.

¡Ah, la obsecuencia! Ha llegado uno para sustituir a la sultana, que se ha reivindicado: para obsecuente, yo. Hay astronautas que ven iluminarse la luna y el sol cuando los mira su presidente. Resulta emocionante.

Por el País Catalán, ese lugar de ensueño, quiero decir que todo lo que tiene que ver con él de forma oficial es inventado, falso y risible. Otra cosa es lo que queda sepultado por toda esa bobería, que merece más respeto. Lo catalán que no tiene nada que ver con el catalanismo. Lo que sí, queda representado por un conde, una rahola, un junqueras, un rufián. Pura filfa. Piltrafas humanas que aprovechando el apoyo que les ofrece el Felón bravuconean ante el Rey.

¡Viva el Rey!