Por parte de fuentes oficiosas, se ha
transmitido la información de que el descarado que viene ocupando la
Moncloa desde hace algún tiempo, con nefastas consecuencias, que
pueden empeorar considerablemente, pretende enviar al Rey, otra vez,
a un lejano país, pero SM no se va a dejar tomar el pelo
https://casarealdeespana.es/2019/11/27/el-rey-se-planta-y-le-dice-no-a-sanchez/.
«Usted
no es decente», le espetó Sánchez a Rajoy, presidente del gobierno
en aquel momento, y a continuación, en lugar de esmerarse y tener
una conducta ejemplar, lo que ha hecho es poner cada vez más alto el
listón de la indecencia. ¡A indecente no le gana nadie!
El
Rey demostró que sabe estar aquel famoso 3 de octubre, cuando
desmontó una felonía del propio Sánchez, que el día anterior se
había lanzado, metafóricamente, al cuello de Rajoy, y se vio
obligado a volver a la senda constitucional.
Los
degenerados vieron entonces que el Rey es un dique que protege a los
españoles honrados y desde entonces insisten en desacreditarlo. Le
tienen planteada una batalla en términos muy duros, sobre todo
porque juegan sucio, muy sucio, y cualquier idea decente les resbala.
En ese menester están personas de la calaña de Colau, Iglesias,
Rufián, Montero, Otegui, Sastre, etc., todos ellos aliados o
aspirantes a serlo de Sánchez. En ese nivel está España ahora
mismo.
El
caso es que lo que ha hecho Sánchez con el PSOE no debería ser
legal. Ni los socialistas debieron haberle consentido que lo hiciera,
ni debería estar permitido por las leyes. Habría que exigir a los
partidos políticos que tuvieran un régimen de funcionamiento
interno que impidiera el caudillismo. No puede ser que alguien, como
es el caso de Sánchez, haga y deshaga a su antojo sin que nadie en
el partido, pese a la incomodidad que generan sus actos, pueda
pararle los pies. Los partidos deberían exigir a sus afiliados un
nivel alto de calidad democrática.
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Tránsito en la mirada'
'Te doy mi palabra'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Tránsito en la mirada'
'Te doy mi palabra'