Con respecto a los asuntos de Cataluña
conviene tener en cuenta algunas cuestiones. En primer lugar, que no
todos los catalanes se han tragado todas las trolas de los
catalanistas.
En segundo lugar, que todos los catalanes
se han tragado una o más de las trolas de los catalanistas. Se
puede observar que se creen el ombligo del mundo y que son muchos los
que tienden a usar ese artefacto lingüístico que se sacó de la
manga un tal Pompeyo Fabra, empeñado en que se notara que su
simpatía por España era nula.
Ambas
cosas son patentes en el digital Dulce Cataluña, cuya labor, por
otra parte, es digna de encomio. De ese sitio, he sacado esta perla,
tan propia del catalanismo: «Los
catalanes tenemos más bien una relación antropológica con la
violencia bastante nefasta. Es decir: esto de la guerra, de las armas
y de la manipulación de productos que pueden herir no es de las
cosas que nos vaya mejor antropológicamente»,
lo
cual lleva directamente a lo que leí en el blog ‘Salmonetes ya no
nos quedan’: «una
máxima de don Torcuato fue: “Si ves venir hacia ti un toro y un
tonto, ¡vete al toro!».
Hay
una operación judicial, a resultas de la cual han detenido a varios
CDR. Hay que recordar que estamos en una democracia y que,
consecuentemente, los jueces hacen su trabajo en defensa de la
sociedad.
Y
aquí aparecen los catalanistas, a cual más cobarde, más embustero,
más vil, más ignorante. Algunos
rufianes no tienen ni idea de nada, pero saben vivir del cuento. Y
luego están esos caganers que al secesionismo le llaman
independentismo, a los prófugos exiliados, y al quebranto de la ley
le llaman democracia, aunque bien es verdad que a esta palabra le
ponen un palito no sé donde, con lo cual está claro que no hablan
de democracia. No tienen ni idea de lo que es. El caso es que todos
esos, antes de conocer el sumario que, -por ahora, es secreto, ya
están criticando la actuación judicial, a la que llaman policial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario