El derrotado líder del PP culpa a Rajoy
de sus malos resultados electorales. Esto es muy inquietante, porque
tenemos un presidente del gobierno del que cabe la sospecha de que
sea psicópata y el líder de la oposición, con esa actitud, no
inspira optimismo.
Si para diagnosticar los males de su
partido y su posible solución no solo es incapaz de asumir su
responsabilidad, sino que además se sirve del sectarismo y del afán
de venganza, mal podrá diagnosticar los males de España en el caso
de que llegue a la presidencia.
Está muy bien que considere que Rajoy
tiene un estilo y él otro, pero de ahí a culparle de su fracaso
media un abismo. Rajoy ha estado callado todo el tiempo, no se ha
metido con él para nada y ha respetado su modo de actuar. En cambio,
Aznar ha estado metiendo la pata todo el tiempo y, lo mire por donde
lo mire, es seguro que le ha quitado. El primer Aznar de todos, el
que hablaba catalán en la intimidad, fue aceptado, entre otras cosas
porque no había más remedio. El chulo creciente en que se ha ido
convirtiendo ya no. Fue miserable que dijera que había entregado una
derecha unida y ahora estaba convertida en tres. Con esa afirmación
trata de culpar a Rajoy, al que sin tener madera de héroe, sino todo
lo contrario, le estalló en la manos la bomba secesionista que
habían estado alimentando González, el propio Aznar, y Zapatero.
Lo de «a mí nadie me llama derechita
cobarde», es seguro que tampoco ha ayudado al PP.
El caso es que Casado no demuestra
capacidad de liderazgo, no ha sabido hacer frente a las trampas que
le han tendido sus adversarios, especialmente Sánchez, y no ha sido
capaz de hacer callar a Aznar. Al culpar a Rajoy de su fracaso se nos
muestra sin grandeza, sin capacidad estratégica, ni autocrítica.
Quizá hubiera sido mejor que ganara Sáenz de Santamaría las
primarias. Ella podía haber sacado partido al doctorado cum fraude.
'2016.Año bisiesto'
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Tránsito en la mirada'
'Te doy mi palabra
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Tránsito en la mirada'
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