No cabe ninguna duda de que si el
Parlamento de la Unión Europea está en Bruselas es debido a la
irrelevancia de Bélgica.
Los belgas deberían tener la grandeza de
reconocer este detalle, en lugar de enorgullecerse y creerse el
ombligo de Europa. La irrelevancia belga se ha venido a justificar en
el hecho de que en su Parlamento se ha debatido la posibilidad de
reconocer la independencia de Cataluña, detalle este que tan solo ha
recogido un panfleto español propiedad de un señor del que muchos
se asombran de que siga siendo conde.
La actitud del Parlamento belga
constituye una inaceptable intromisión en los asuntos internos de
España. Cabría recordarles a estos diputados belgas que España
forma parte de la Unión Europea y, por tanto, contribuye al
enriquecimiento de Bélgica. Tiene una Constitución y unas leyes
homologables a las de los demás países de la Unión y los
tribunales de justicia españoles han declarado ilegal el movimiento
separatista promovido, entre otros, por los prófugos que se
encuentran en Bruselas. Por tanto, no cabe discusión alguna sobre el
caso en ningún Parlamento de una nación democrática. Cualquier
actitud en este sentido es equiparable la de Maduro. No importa cuál
haya sido el resultado de la votación, porque si llega a ser
favorable los secesionistas Bélgica se habría puesto a la altura
que tuvo cuando exhibía en sus calles a los congoleños como si
fueran atracciones del circo, en el siglo pasado, e incluso sus
ciudadanos les daban de comer por encima de la vallas dentro de las
cuales los tenían para que fueran contemplados.
Los belgas se creen más civilizados que
los españoles, por lo que demuestra su Parlamento, que no tiene
suficiente con lo que dicen las autoridades españolas. Aunque es
cierto que también en España hay imbéciles que recurren al
franquismo como argumento explicativo. En ninguna parte está
escrito que la imbecilidad tenga cura.
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'El séptimo círculo del infierno'
'La Guerra Civil y la Tercera España'
'Cantos al camino'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'El séptimo círculo del infierno'
'La Guerra Civil y la Tercera España'
'Cantos al camino'
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