El Rey, discurso mediante, ha
restablecido el orden. A partir de ahora, la opinión internacional,
al menos la de los países democráticos, tendrá que ver a Junqueras
y Puigdemont como lo que son, unos candidatos al presidio por
deslealtad consumada. Esperemos que se consume su entrada en la
cárcel y por una temporada larga.
Les debería acompañar Forcadell, a la
que seguramente las demás reclusas le explicarían que quien paga
manda y si no le parece bien pertenecer al Estado español lo primero
que debería haber hecho es dimitir de su cargo y devolver todo lo
cobrado.
El discurso del Rey es un tirón de
orejas para Rajoy y Sánchez, por haber permitido que las cosas
lleguen a este punto; para Rivera no, porque su capacidad de
actuación es menor.
El tirón para el presidente es leve,
porque sólo ha contado con la ayuda, insuficiente, de Ciudadanos.
Sánchez, en cambio, debería dimitir cuanto antes, o ser destituido
por su partido, puesto que su reacción al 1-O puede considerarse
también como traición a España.
Los demás partidos, Compromís, Bildu,
ERC, Podemos, etc., son como hojarasca podrida y votarlos es como
echar piedras contra el propio tejado, porque lo que quieren es la
ruina de todos. Lógicamente, el discurso del Rey les ha de sentar
mal. Es de esperar que la fiscalía investigue las actuaciones de
Colau, Iglesias, etc., en el mal llamado referéndum, por si fueran
constitutivas de delito.
No sería de recibo que ahora que la
Justicia, presumiblemente, va a comenzar a actuar contra los
sediciosos apareciera alguien pidiendo clemencia. El daño que han
hecho a los españoles y el ridículo en que han puesto a nuestro
país exige castigos ejemplares. Y no sólo para los principales
actores del esperpento, sino para todos los que tuvieron algo que
ver, el que lanzó la silla contra la policía, la señora que dijo
que le habían roto todos los dedos, los que patearon al policía
caído en el suelo, etc.
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'El séptimo círculo del infierno'
'La Guerra Civil y la Tercera España'
'Cantos al camino'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'El séptimo círculo del infierno'
'La Guerra Civil y la Tercera España'
'Cantos al camino'
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