Luego
dicen que España es un país de pandereta, y nos quejamos. Habrá
que empezar por reconocer que algo de razón tienen, puesto que no
paramos de darles motivos para que piensen de este modo.
Basta
con fijarse, sin ir más lejos, con los numeritos que montan día sí,
día también los nacionalistas. El blog Dolça Cataluña no da
abasto en su tarea de dar cuenta de los hechos risibles que
protagonizan estos elementos que un día debieron guardar la cordura
en un armario y ya no recuerdan en cuál.
Félix
de Azúa, en un artículo titulado El
rinoceronte, que
más bien parece un acta notarial en la que se da fe del estado de
las cosas, dice
lo siguiente: “Ni
uno sólo de los 300 historiadores subvencionados para los fastos de
1714 ha desmentido estas quimeras. Su
silencio otorga.” Si
se tiene en cuenta que las quimeras a las que se refiere son las que
propagan Víctor Cucurull y Jorge Bilbeny, se
comprenderá que el asunto es, a la vez, risible y preocupante.
Cualquiera
que no sea un catalufo se parte de risa escuchando a esos dos.
Es
preocupante porque 300 historiadores subvencionados cuestan mucho
dinero. Si
los 300 callan, dando por buenas las burradas que dicen esos dos,
comprometiendo su prestigio con su silencio, es porque les pagan
bien. ¿Y
de dónde sale ese dinero? La
Generalidad catalana no puede pagar a las farmacias. El dinero se lo
da el gobierno de Rajoy, o
sea que procede de los impuestos de los españoles. Y
Junqueras amenaza con no pagar la deuda que tiene la Generalidad
catalana con los españoles.
Y
esa
es la cuestión. El nacionalismo catalán ha llegado al máximo
extremo de ridiculez posible; el vasco dio argumentos a los
terroristas. Y
el gobierno español está acojonado ante ambos. Pero todos los
políticos, los que nos odian y los que no nos defienden, cobran sus
sueldos todos los meses.
'Teoría General de la Evolución Condicionada de la Vida'
'Escucho otra Cadencia en mi Memoria'
'Dos veces bueno'
'Cantar de Mío Cid'
'Mauthausen, después'
'Citileaks: los españolistas de la plaza real'
'Yo, Lope de Aguirre, rebelde hasta la muerte'
'Molestia Aparte'
'Escucho otra Cadencia en mi Memoria'
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