En los años 80 pudo sobrevivir por sí
mismo y sin ayuda a la mala gestión de su equipo directivo, que
había arriesgado mucho en el mercado inmobiliario. Se destituyó al
presidente del Consejo de Administración y se nombró para el cargo
al que había sido el vicepresidente, como si no tuviera nada que ver
con lo anterior.
Se puede pensar que de la siguiente
crisis en la que cayó el Banco de Valencia, por los mismos motivos
que en la vez anterior, se impidió que pudiera recuperarse. Eso se
desprende de la entrevista que publica hoy Valencia Plaza, hecha por
Javier Alonso a Salvador Climent Serrano.
Sorprende a raíz de esta información,
aunque no tanto, porque aquí nos conocemos todos, la pasividad del
gobierno valenciano de la época, y del gobierno valenciano actual.
¿Cómo es que aquéllos no trataron de impedir la tropelía que se
estaba cometiendo? No pueden alegar que no se daban cuenta de nada,
porque aquel gobierno tenía economistas y abogados suficientemente
preparados para percatarse de lo que ocurría. El daño que se estaba
haciendo a los valencianos era considerable. Y este nuevo gobierno,
tan dado a criticar al anterior, debería estar haciendo todo lo
posible para recuperar el banco. Hay demandas en los juzgados que la
Generalidad Valenciana debería apoyar pública y fehacientemente.
Pero concurren dos circunstancias. La GV es catalanista y tiene todo
el interés puesto en reabrir la televisión valenciana para
incentivar el uso del catalán. No querrá incomodar a un banco
catalán.
Además de los estamentos oficiales están
los empresarios, que también deberían haber hecho lo posible para
impedir la desaparición del Banco de Valencia. Creo que fue Rato
quien lo dejó caer, quizá para forzar la dimisión de Olivas. Pero
seguramente el banco podría haber salido a flote, como ocurrió en
los ochenta. Como debería ocurrir ahora si se obligase al banco que
lo tiene a devolverlo a los antiguos accionistas.
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
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'1978. El año en que España cambió de piel'
'Por qué España'
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'Filosofía, teología y el sentido de la historia'
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