Este era el eslogan, que quizá todavía
se use, con el que se pretendía, o pretende, ridiculizar o presionar
a los trabajadores por cuenta ajena que prefieren a la derecha.
Un eslogan nada democrático, por cierto,
y sí con mucha malasombra, porque induce a faltar al respeto a
muchos ciudadanos y pretende coartarles su libertad de elección. Se
conoce que abundan esos que piensan que puesto que son de izquierdas
todo lo que hagan está bien. Más o menos, como el dios del Islam.
Y ahora llega el guaperas que ha
recuperado el mando del PSOE y además de procurarse el poder
absoluto en el partido (demostrando cuál es su concepto de la
democracia), se mostrado partidario del galimatías ese del nación
de naciones, de naciones, etc. Se supone que a partir de que Pachi
López le hiciera la pregunta en aquel debate le ha dado por
estudiarse el concepto y ha llegado a esa conclusión.
Al margen de que esa sea una burrada de
burradas, queda una cuestión más importante: ¿Qué le importa eso
a un obrero? ¿Qué problemas le resuelve a un obrero ese galimatías?
Porque si se hace creer que la izquierda se preocupa por los obreros,
los hechos demuestran que eso no es cierto. Si fuera cierto que Pedro
Sánchez se preocupa por los obreros trataría de aliviar la carga
que llevan sobre sus espaldas, ya que con sus impuestos se mantiene
a un número ingente de mangantes. En España hay un gran número de
instituciones y organismos perfectamente prescindibles. Si los
obreros pudieran ahorrarse todo ese dinero que se malgasta en
inutilidades, podrían alimentarse mejor, vestir mejor, y al poder
comprar más cosas se crearían más puestos de trabajo.
En lugar de eso, el guaperas insiste en
tomarles el pelo, en hacerles creer que es bueno gastar dinero en
esas entelequias, etc. Que los socialistas hayan votado a ese
individuo no puede significar más que la pulsión suicida del PSOE
es muy fuerte.
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978. El año en que España cambió de piel'
'Cantos al camino'
'Historias de la otra razón'
'Por qué España'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978. El año en que España cambió de piel'
'Cantos al camino'
'Historias de la otra razón'
'Por qué España'
No hay comentarios:
Publicar un comentario