Hay que tener en cuenta que el presidente del gobierno es un elemento que cree que su palabra es la ley. Se han escrito textos muy hermosos sobre el aborto, pero el detalle más ejemplar fue el de Marian Suárez Illana, a la que detectaron un cáncer cuando acababa de quedarse embarazada y para poder tratarla necesitaban que abortara, a lo que ella se negó. Cuando dio a luz ya permitió que le hicieran todo.
Por supuesto que Sánchez no tiene ni idea de quien fue esta señora, y tampoco tiene pinta de haber leído nada que no se refiera a su propia persona, de modo que podemos afirmar que habla sin saber lo que dice. Por supuesto que Isabel Díaz Ayuso tiene más conocimiento del asunto y una idea mucho más sensata de la democracia. Su empedernido rival, que se cree capaz de imponer su criterio, por encima de la ley, por encima de todo, debería llevarse un revolcón del tamaño que se merece. Habla el elemento de los ‘derechos de las mujeres’. ¿Qué derechos ni que mujeres? Seguro que hay más de las que se piensa a las que no hace ningún tipo de gracia que un chulo de barrio asuma su defensa.
Este gobierno es un absoluto desastre y solo una Constitución hecha para favorecer al PSOE y un partido enseñado a obedecer sobre todas las cosas permite que no se le haya mandado todavía al sitio que merece. Toda España está en su contra, como él sabe y ese es el motivo por el que no convoca elecciones, y el tipo ocupa la presidencia con el apoyo de un grupo minoritario de ciudadanos -y esa es otra trampa legal- que le permite ir en contra de los intereses de los ciudadanos. Espero que los jueces le estampen un manotazo a mano abierta.
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