Juaristi publicó ayer un artículo, en
el que con argumentación contundente explica el estado de la
cuestión con respecto a las próximas e inevitables excarcelaciones
de etarras.
Unos no tienen más remedio que
exigirlas, aunque cabe sospechar que se alegran mucho de que se dé
esa circunstancia, y otros se ven obligados a ceder, y también en
este caso se sospecha que no les pesa tener que hacerlo.
De lo que se olvida el erudito y
brillante articulista es de que UPyD fue el más firme bastión
contra el terrorismo y el mejor aliado de sus víctimas. No se le
debió de escapar en su momento, aunque no recuerdo haberle leído
nada al respecto, que hubo una campaña tremenda para hundir a
UPyD, antológicas traiciones incluidas, y no me extrañaría nada
que hubiera alguien recopilando información en las hemerotecas, para
reunirla toda en un libro, para que esté a disposición de los
estudiosos que en el futuro deseen averiguar los motivos del
inexplicable y fulminante declive del partido que supo poner patas
arriba al sistema.
Algún personaje que tiempo atrás famoso
en virtud de ciertos dones que la naturaleza le otorgó, pero que por
su cuenta se dotado de una característica que en su caso es mucho
más grande que esos dones, y que se trata de la hipocresía, se
lamenta ahora de que UPyD no esté. ¡Qué se va a lamentar! Si
estuvo al lado de donde se montó la campaña y la estuvo aplaudiendo
y alentando.
Tampoco ha tenido en cuenta el
articulista el desinterés del pueblo español por las víctimas del
terrorismo, desinterés que viene a ser por la dignidad y que da
miedo, porque se extiende a todos los campos de la vida y es el que
ha posibilitado que un grupo de felones, con malas artes, se hayan
apoderado del gobierno y estén a punto de llevarnos a todos a la
ruina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario