martes, 25 de junio de 2013

Fernando García no fue indultado

Con la misma determinación con que estos gobernantes que sufrimos recortan prestaciones y mantienen desmesuradamente alto el número de integrantes y beneficiarios de la casta política, se le negó el indulto a Fernando García, el padre de una de las niñas de Alcácer.
La de conceder indultos porque sí es otra de las prerrogativas de que se dotó nuestra oligarquía política y así pudo beneficiar a un banquero, porque las oligarquías política y financiera se llevan muy bien.
Ahora bien, eso de concedérselo al padre de una joven que fue violada repetidas veces, torturada y asesinada es harina de otro costal.
El pecado de este hombre es que no se cree la versión oficial de los hechos, motivo por el cual se puso a investigar por su cuenta, y encontró un colaborador cualificado.
Vivimos en un país que se dice católico; muchos de los componentes de la oligarquía política presumen de catolicismo; no obstante, el rencor anda suelto.
Estamos tan acostumbrados al rencor que ni los propios curas protestan cuando se manifiesta ante sus narices. No me extrañaría nada que entre los propios curas y obispos hubiera rencor a raudales.
El hecho es que a un padre cuya hija fue violada repetidas veces, torturada y asesinada no se le perdona nada.
Hubo un ministro muy bruto, del que ya no se acuerda nadie, quizá Pablo Sebastián sí, que le recomendó que se fuera a llorar a su casa. Y ahora un gobierno en el que hay algunos ministros del Opus Dei le deniega el indulto.
La opinión mía, muy humilde obviamente, es que ni siquiera debió ser juzgado. ¿Nadie entiende lo desesperado que debe de estar?
En España, los oligarcas siempre tienen las de ganar. En el sistema español no cree nadie. Y hay políticos con tan poco sentido que piden el indulto para la asesina de Benejúzar y se inhiben el caso de un padre que investiga y no está conforme.


No hay comentarios: