Esa pobre mujer que ocupa la vicepresidencia del gobierno en plan hacer el ridículo un día sí y otro también, aunque no tanto como otros compañeros y compañeras de su gabinete, no sabe cómo hacer para distraer al personal y no se fije en la incomparable incompetencia del gobierno del que forma parte con un papel destacado.
Nunca se había visto en un país democrático, y tampoco es probable que vuelva a ver jamás, un gobierno tan numeroso compuesto mayoritariamente por inútiles.
Este pueblo cordobés llamado Cabra también vio a otro ministro de España, que se llamaba Solís y no dio motivo a tanta risa como esta, pero algo sí: cuando preguntó: ¿para que sirve el latín? Para que los de Cabra se llamen egabrenses. Pero Carmen Calvo induce a pensar que la cabra tira al monte.
Quiere prohibir el enaltecimiento de las dictaduras, así, en plural, pero todo el mundo sabe que solo se refiere a una, a esa en la que formó parte su paisano. Porque si fuera verdad que habla en plural debería darse cuenta de que su señorito ha eliminado todo tipo de control en su partido, el PSOE. Es un dictador que gobierna el partido y la nación con puño de hierro y sonrisa de psicópata. Esta señora de Cabra es doctora en no sé qué, pero es dudoso que pueda comprender eso que le digo. No la creo capaz de mantener una conversación inteligente. Tampoco lo ha demostrado hasta el momento.
Conviene añadir que forman parte del mismo gobierno que ella unos cuantos ministros e incluso un vicepresidente que son incompatibles con la democracia. Su partido, aliado del PSOE para formar gobierno, no habría sido legalizado en ningún país del mundo con solera democrática. También apoyan a su gobierno otros partidos incompatibles con la democracia, con delincuentes en sus filas.
Esta Carmen Calvo, además de boba, tiene la cara muy dura. Es lo que está de moda hoy.
‘2016. Año bisiesto’
‘El Parotet y otros asuntos’
‘Diario de un escritor naíf’
‘Yo estoy loco’
‘Valencia, su Mercado Central y otras debilidades’
‘1978.El año en que España cambió de piel’
‘Tránsito en la mirada’
‘Te doy mi palabra’
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