Un titular de prensa se refiere a la ira
de ese personaje estrafalario y ridículo que presidió la
Generalidad de Cataluña, con unos resultados desastrosos y al leerlo
uno no sabe si reír o llorar.
Todo lo de ese individuo es grotesco, por
lo que en un primer momento mueve a risa, pero enseguida aparece la
evidencia del daño causado y se abre paso la irritación. Mucha
gente se ha arruinado para siempre por culpa y aunque buena parte de
los perjudicados sigue confiando en él, porque el nacionalismo es
incurable, no por ello el daño hecho es menor.
El nacionalismo es tan malo que muchos
nacionalistas se creen socialistas, lo cual es imposible porque no se
puede ser nacionalista y socialista a la vez. El nacionalismo es
egoísta y promueve la exclusión del diferente y la formación de
barreras, mientras que el socialismo, en teoría, es
internacionalista y solidario. ¿Cómo consiguen algunos concitar
cosas tan dispares? Pues del mismo modo que lo consiguen los obispos.
Ser nacionalista es cometer pecado, y sin embargo hay curas y monjas
nacionalistas. Hacen piruetas mentales con el fin conciliar
propósitos opuestos. ¿Cómo puede la Iglesia Católica bendecir una
doctrina que incita al odio? De ninguna manera, pero lo hace. Y en
cuanto empiece la campaña de la renta nos pedirá que pongamos la
equis. ¿Cómo pueden los socialistas bendecir una doctrina que
pregona la superioridad racial de unos sobre otros? Pues hay una
lista larga de socialistas, supuestos, que van por ese camino.
Así que Puigdemont tiene ira … Lo que
sería raro es que tuviera vergüenza. Y más raro todavía que
tuviera el valor de dar la cara y entregarse a la justicia. En el
juicio tendrá la posibilidad de defenderse y explicar sus razones.
Pero a eso, evidentemente, no se atreve, porque no lograría
convencer ni a los suyos.
'2016.Año bisiesto'
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'La piel del deseo'
'Alicia lo sabe'
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
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