Piensan los bellacos que una mentira repetida mil veces se convierte en verdad. Lo piensan así porque no tienen más remedio, mentir es propio de siervos, y son siervos.
La verdad es propia de personas libres y en esa categoría humana se encuadran tanto Ayuso como Nacho Cano. Por supuesto que Ayuso se opone a cualquier atropello, y por eso es la mejor.
Aquí tenemos ahora, como siempre, la lucha, esta vez muy descarnada, entre la mentira y la verdad. Siempre, y esperemos que esta vez también, todos los que han intentado amilanar a la presidenta de los madrileños han salido escaldados. Todo el Equipo de Opinión Sincronizada está haciendo el ridículo frente a ella. Y frente a Nacho Cano, que también es muy bravo. Él tiene razón, y fuera del equipo malasombra citado todo el mundo sabe que tiene razón, y lo proclama a pecho descubierto, como hombre libre que es, frente a los siervos que le quieren morder.
Ha dicho el PSOE que las declaraciones de Ayuso son intolerables. ¿Con qué autoridad moral puede decir eso el PSOE? ¿Ha protestado por el despliegue policial en la plaza de Castilla? ¿Ha protestado por la amnistía? El PSOE es un partido en trance de desaparición por falta de fundamentos éticos y morales.
Cabía, y cabe, albergar la esperanza de que Begoña nos libre del Felón, pero si el PSOE va metiendo la pata de este modo con Ayuso, acabará siendo ella quien lo consiga. No sé cuántas le debemos ya.
O sea, que para desviar la atención de los escándalos de David y Begoña, montan una operación policial, que quizá sea parcial o totalmente delictiva, y esperan que los españoles se traguen la bola. ¡Pero si no se lo creen ni ellos! La manera de reaccionar, como perros de presa, intentando todos la misma dentellada, lo demuestra.
Si pensaran que tienen razón actuarían de un modo más señorial.
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