No es nuevo el deseo de los golpistas de
que haya sangre en lo que ellos llaman ‘el pursés’, sino que
desde que comenzó la etapa dura surgieron voces alertando de que
podía aparecer un loco que se hiciera matar y al mismo tiempo otros
trataban de incitar a las masas para que surgiera ese loco.
Seguramente, Rajoy sintió terror ante esa posibilidad.
Todos respiramos aliviados cuando aplicó
el 155 y lo hizo sin que se hubiera derramado ni una gota de sangre,
aunque algunos tunantes se le escaparon al extranjero. El entonces
presidente debió de pensar que los tribunales de justicia europeos
se comportarían de forma civilizada y leal y pronto los presuntos
facinerosos estarían de vuelta.
Pero el catalanismo se iba deshinchando y
tanto Torra como Torrent medían sus pasos y sus palabras, para no ir
a hacer compañía a Junqueras y los otros. El afán de Sánchez de
ser presidente y la certeza de que nunca lo lograría mediante unas
elecciones le llevaron a provocar un vuelco político, apoyado
precisamente por Torra y todos los otros elementos antisistema del
Parlamento.
Torrent continúa tratando de evitar la
cárcel, y eso que parecía tonto, pero Torra se ha envalentonado,
siguiendo los pasos de aquellos que se creían impunes y ahora están
en la cárcel o fugados. Son unos prófugos. Los encarcelados sueñan
con el indulto, mientras Torra fuerza la máquina, para que Sánchez
no se atreva a llevarle la contraria. Aquellos incitaban a las masas,
sin dar señal de estar ellos dispuestos a lo mismo, a arriesgar sus
vidas. Torra hace lo mismo, de forma más directa, pero igual de
cobarde. Quiere que sean otros los que se sacrifiquen.
Se va a encontrar con la fuerza del
pueblo español, concentradas esta vez en Vox, en el que están
puestas las esperanzas de esos ciudadanos que no soportan bien que
los separatistas los pisoteen y los insulten una y otra vez.
'2016.Año bisiesto'
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Cavilaciones y melancolías'
'Necesidades emocionales'
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Cavilaciones y melancolías'
'Necesidades emocionales'
No hay comentarios:
Publicar un comentario