La egabrense debería saber que la verdad
y la cara dura no son compatibles, no maridan bien, que dirían los
cursis, como lo son esos podemitas que imponen su ley en el gobierno.
Ha dicho ella: «La democracia ha de
mirarse a sí misma con las gafas de la verdad».
La democracia no puede mirarse de ninguna
manera, y mucho menos ponerse gafas. Quienes podrían hacerlo son los
demócratas, y en el gobierno del que forma parte esta señora no hay
ninguno. Por sus hechos los conoceréis, dice la Biblia. Un demócrata
respeta a su adversario ideológico, no lo tiene como enemigo, ni
incita a que se le odie.
Un demócrata no se sirve de actividades
con las que supuestamente se pretende hacer justicia de forma
retroactiva para tratar de aniquilar políticamente a sus adversarios
ideológicos.
Un demócrata no confunde la posverdad
con la verdad, ni se cree en posesión de esta. Ni tampoco miente
sistemáticamente, como es el caso del señorito al que obedece y
cuida con mimo la señora egabrense, de la cual los demás
egabrenses no tienen motivos para sentirse orgullosos. Y si se da el
caso, que santa Lucía les conserve la vista.
Un demócrata jamás formaría gobierno
gracias al apoyo de partidos totalitarios, como es el caso de los
comunistas de Podemos, de los racistas y xenófobos como Torra, de
delincuentes como Junqueras, de terroristas como Otegui, o de golfos
como Urcullu.
Esta supuesta demócrata, cuyos hechos
desmienten que lo sea y es obvio que ella lo sabe, se mantiene
gracias al odio que define a las malas personas y que sirve de
sustento y apoyo a los malos políticos. El odio no tiene nada que
ver con la democracia.
Un demócrata, en el caso concreto de
España, sabe que hoy por hoy, el Rey representa a todos los
españoles. Y el gobierno actual no respeta al Rey.
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Tránsito en la mirada'
'Te doy mi palabra'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Tránsito en la mirada'
'Te doy mi palabra'
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