Ermita y en singular, no en plural, pero
no porque sea más pequeña que una iglesia, sino porque bastaría
con añadir una te para definir al personaje. Hay que decirlo ya:
Termita.
Jamás parará de hacer maldades. Siempre
tiene la palabra democracia en la boca, cuando no tiene ni un solo
pelo de demócrata. Ojalá lo tuviera, pero no es así. Y ni siquiera
se vislumbra la posibilidad de que pueda cambiar. No es demócrata
desde el momento en que no esconde sus simpatías por Otegui, un
personaje que quizá haya cometido delitos más graves que aquellos
por los que fue condenado. No puede ser demócrata alguien que apoya
a un terrorista convicto y confeso, y al que si se le da la
oportunidad en la televisión pública muestra al mundo su vileza.
Un demócrata es alguien sumamente
educado, con interés con hacer el bien a los demás y capaz de hacer
suyo el dolor de otros. En cambio, este sujeto desgraciado, no tiene
educación alguna, puesto que se presentó ante el Rey, que nos
representa a todos, en visita oficial, vestido de cualquier manera.
No tiene ningún interés en hacer el bien a los demás, puesto que
su eslogan propagandístico incluía amenazas: «el miedo va a
cambiar de bando»; entre sus aficiones figura la guillotina y
cuando alguien tiene un trasto de estos entre las manos, que además
es objeto de su deseo, hay que mantenerse a distancia. A mucha.
Tampoco es capaz de hacer suyo el dolor de otros, puesto que el
sufrimiento de los venezolanos le importa un bledo, o aún menos; él
sabrá qué es lo que sale ganando con el dolor de otros..
Falta hablar de su aversión a la verdad
y de la relación de sus antecesores con el franquismo, que parece
ser que los trató muy bien y les pagó mejores sueldos. Hay una
excusa que explica el cargo de su abuelo en el ministerio de Girón,
pero… ¿y si fuera una coartada?
'El Parotet y otros asuntos'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Tránsito en la mirada'
'Te doy mi palabra'
'Diario de un escritor naíf'
'Yo estoy loco'
'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades'
'1978.El año en que España cambió de piel'
'Tránsito en la mirada'
'Te doy mi palabra'
No hay comentarios:
Publicar un comentario