sábado, 7 de mayo de 2016

Compromís, partido corrupto

En el PP y el PSOE hay corrupción, mucha corrupción si se quiere, pero no son partidos corruptos, sino que lo que ocurre es muchos de sus militantes han sucumbido a la tentación porque se sentían impunes.
Es una pena que la gente que se muestra contrariada por la corrupción no votara a UPyD, que es el partido que trae propuestas para acabar con ella. A muchos de los militantes del PP y el PSOE no les interesa la independencia judicial, sobre todo a los que tienen algo que temer, pero a los partidos sí, porque con ella podrían recuperar su prestigio. Tampoco son partidos corruptos UPyD, Ciudadanos, Vox y hasta IU, aunque últimamente tiene movimientos raros.
En cambio, Compromís es un partido intrínsecamente corrupto, dado que es enemigo del Estado que le permite la existencia, cosa esta que no se entiende. No es el único partido, por otra parte, que aspira a destruir España y luego, cuando sus componentes que han resultado electos toman posesión de sus cargos recurren a fórmulas raras para jurar o prometer la Constitución, cosa que tampoco se comprende que se permita.
Últimamente, una señora de Compromís se ha negado a declarar ante el juez en español, porque sólo lo quiere hacer en catalán. Esto supone una burla a los españoles, un desprecio al juez, al que le hace perder un tiempo que no tiene, y un derroche inútil, porque hay que pagar a un traductor jurado.
Las leyes españolas son muy permisivas con estas personas que no tienen vergüenza. El alcalde de Valencia, también de Compromís, cuelga chorradas en el balcón del ayuntamiento. Toma partido en cosas que no son de su competencia como alcalde y que sabe perfectamente que la mayoría de la población no comparte. Eso también es corrupción. Y luego están todos esos carteles que pueblan Valencia escritos en una lengua que sólo hablan cuatro gatos.
Obviar la lengua española también es corrupción.

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