Creo que no miento si digo que la inmensa mayoría de los ciudadanos ignoraba todo sobre este juez, pero el azar ha hecho que le toque ver el asunto Begoña y la mafia se ha puesto a investigar su vida y ha continuación ha difundido a los cuatro vientos cosas que no vienen a cuenta.
Hay algo obvio y es que si no hubiera caso Begoña este juez seguiría siendo desconocido para el gran público. Además, el caso Begoña se convirtió en noticia en todo el mundo porque uno que no tiene idea buena se dirigió a los ciudadanos de forma improcedente e inoportuna, con una en la decía que la quiere mucho, o algo así. Esa carta era un correo no deseado, puesto que a nadie le interesaba.
Que dejen que el juez haga su trabajo. Si las personas investigadas son inocentes se verá en el juicio, si se llega a él.
Todas estas maniobras en contra del juez son como asunciones de culpabilidad. Que un juez tenga que recurrir al heroísmo para hacer su trabajo debería ser motivo de vergüenza para el PSOE. Debería ser, pero no es.
También el PSOE se ha comportado con la misma brutalidad con otros jueces. Con Marino Barbero, por ejemplo. Estaba, precisamente, investigando la corrupción del PSOE, resistiendo presiones y artimañas, en vista de lo cual se hicieron públicos sus problemas financieros. Eso es información confidencial. Ese hecho debió ser investigado y los culpables castigados.
Estos comportamientos mafiosos son habituales en el PSOE, como estamos viendo en nuestros días.
Aznar pudo haber acabado con ellos devolviendo la independencia a los jueces, pero no lo hizo y esa fue la mayor de sus canalladas, que no son pocas.
Otra de las estratagemas ha sido la de querer quitarle el caso al juez Peinado por medio de las terminales judiciales del PSOE en la UE, pero no lo han conseguido.
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