miércoles, 23 de marzo de 2022

La izquierda de Madrid en evidencia

 

Las dos formaciones de la derecha han llegado a un acuerdo para reducir el número de diputados de la Asamblea de Madrid de 136 a 91, medida que está en consonancia con su intención de reducir la carga fiscal de los madrileños.

Para poder llevar a cabo esta medida necesitan el apoyo del PSOE, porque no cabe esperar, por motivos obvios, que los partidos de ultraizquierda se lo den. De momento, ninguna de las formaciones izquierdistas o ultraizaquierdistas está dispuesta a colaborar y el motivo que han aducido todas es pasmoso, porque todas alegan que la reducción propuesta es un ataque a la democracia. No he visto que hayan explicado que tiene que ver el culo con las témporas, ni tampoco me he molestado en indagar, en la seguridad de que no lo han hecho. Teniendo en cuenta dos de esos tres partidos son comunistas y, por tanto, su relación con la democracia es inexistente o fraudulenta, el asunto está claro. Hace unos años se inventó el eurocomunismo, que venía a ser como un comunismo aguado, pero eso ya no existe. Y los del PSOE arrastran la superioridad moral que les caracteriza desde la muerte de Franco, pero cada vez con menos convencimiento, ya simplemente mirando a su público, sin desafiar a sus rivales como antaño. El descaro de Sánchez tiene consecuencias.

Lo que demuestra todo esto es que no tienen ninguna confianza en obtener un buen resultado electoral, motivo por el que prefieren castigar las espaldas de los trabajadores.

Lo que deberían tener en cuenta los votantes, para que los sinvergüenzas no los engañen con sus cantos de sirena, es el modo real de mejorar los salarios no es subir el SMI, sino que haya mucha demanda de empleo. No la puede haber si la casta política aumenta los impuestos y luego gasta ese dinero de forma improductiva.

Las pensiones no se pueden garantizar por ley, ni recogiendo firmas. Sino procurando que el Estado tenga dinero para pagarlas. Pero el Estado lo derrocha.

No hay comentarios: